Uno de los grandes males de esta sociedad es que todo se
supedita al libre mercado y al consumismo más desaforado, pero lo más indignante
es cuando se manipula tan groseramente a los más pequeños.
Porque que existan empresas como "Caldea
likids" que oferten
"hidromasajes manicuras, masaje de pies y mascarillas faciales con yogurt"
para los más pequeños es simplemente introducir a los niños
en el mundo de consumismo, el individualismo y el egoísmo más desaforado.
Y por
su fuera poco la fotografía de anuncio de la niña con una toalla en la cabeza y
con cara de felicidad suprema, con una pose casi sexual, deja bien a las claras para que tipo de público
está diseñado este "servicio".
Luego por supuesto nos sorprenderemos de que de mayores
estas niñas a lo más que aspiren es a ser modelos anoréxicas o mujeres
florero
para el más que justificado disfrute de sus mariditos y a la vez
propietarios y todo ello pagado por unos más que ilusionados padres.
[Estampida] Bueno mi querido Ateo, en este caso estoy de acuerdo con el planteamiento pero no con las conclusiones. Mi hermana y yo somos de familia de camionero y ama de casa. Cuando mi padre empezó a ganar dinero nos ha llevado varias veces a los hoteles de punta cana donde iban los futbolistas, al Caldea este y demás. Donde iban los pijos vamos. Seguimos siendo gente corriente y trabajadora. Quiero decir que la educación es lo que cuenta y no por llevar a tu hija a darle un masaje de yogur se tiene que convertir en un zorrón sin expectativas. Mi hermana de hecho es educadora infantil, no gana mucho y mis padres la ayudan, pero no la mantienen. Ahora bien, el anuncio es horrible, de eso no hay duda.
ResponderEliminarEstampida
ResponderEliminarSiento estar en desacuerdo contigo. Los casos individuales no sirven porque siempre hay excepciones. Te pondré un ejemplo más que antiguo. Si coges a 100 o 1.000 niños y les "enseñas" que una paloma extraterrestre fornicó con una virgen, por supuesto que no todos van a ser de adultos cristianos, pero ten por seguro que una gran parte (incluso una mayoría) de ellos sí. Lo mismo pasa si les adoctrinas en las barbaridades que dijo un beduino pederasta, una gran parte de ellos (aunque no todos) acabarán siendo musulmanes. Y por supuesto muy pocos o ninguno hubieran sido creyentes de adultos de no haber recibido ese adoctrinamiento infantil.
Entonces el caso que nos ocupa es similar. Si cientos o miles de niñas pasan varias veces a lo largo de su infancia por este tipo de spas, ten por seguro que muchas de ellas entenderán que es normal "cuidarse" con extractos de yogur, de mango o de caca de la vaca si eso se pone de moda para estar más bella, generando dos tipos de comportamientos insanos en los chavales: el primero es la superstición y el segundo el sexismo.
[Estampida] Bueno de eso no hay duda, por eso digo que lo que ha de primar es la educación, y que todo servicio puede suponer un perjuicio si no se utiliza correctamente ni en su justa medida. A lo que voy es que a mi me encantaría que hubiera mas servicios de otro tipo y no estas bobadas, pero tampoco deberían de suponer un problema. Si uno es un mal padre educará mal a su hijo con servicios de spa o sin ellos. Hago hincapié en el "deberían", porque todos sabemos que hay más tontos que botellines... Si me dices que desapruebas la publicidad dirigida a los niños, coincido contigo.
ResponderEliminarEl opio del pueblo, ademas de la religion ahora se le ha unido el consumismo. Los poderosos estarán dando saltos de alegria
ResponderEliminarSabemos que el cerebro humano es como una computadora. Y cuando niños es como si fuéramos computadora nuevas, con un sistema de funcionamiento pero sin memoria acumulada, que esta va a ser determinada por su poseedor. Sabemos que es un veneno darle a un infante, de menos de dos años, chocolate o azúcar. Porque para el crio, está determinado que debe confiar en las personas que le rodean, y en el caso de darles algo, quedará grabado en sus cerebros, hasta la muerte, de que aquello es bueno para su bienestar saludable. Otra cosa es también que el niño viene con su memoria virgen, e todo lo que hace es imitar los que le rodean. Vemos muchas veces niños que meten el dedo en las narinas, o que juegan como que están fumando, porque naturalmente las personas mayores son el ejemplo a seguir. Los vemos gritar cuando un juego de futbol o arrodillarse para rezar. Este tipo de comportamiento de imitación es visto hasta en los animales. Todo lo que aprende un infante va a ser un condicionamiento por el resto de la vida. El problema se agrava cuando la justicia y sus gobernantes no prohíben propaganda de consumo para niños. La propaganda debería ser designada solamente para personas con capacidad económica de consumo. Propaganda para niños es terrorismo. Cuantas veces vemos niños en supermercados o jugueterías llorando por un juguete o un dulce porque está en la moda o simplemente porque fue determinado que es lo que precisa para ser feliz. Si la propaganda funciona con débiles mentales adultos, imaginen con niños. Siéntate delante de un niño con un libro y él será lector. Compórtate de forma racista delante de un niño y el será racista. Enséñale “que pensar” a un niño y será creyente. Enséñale “como pensar” a un niño y será un libre pensador.
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