No hay nadie más ignorante e inútil que aquel, que de rodillas y con los ojos cerrados busca una respuesta.
Las personas religiosas que practican su fe sin ningún tipo de fanatismo han conseguido que cualquier crítica (por más real y probada que esta sea) a la religión se considere una ofensa de mal gusto y muchas veces hasta punible por la ley.
Un poco de humor sirve para desenmascarar es totalmente perversa doctrina católica, en donde tras innumerables crímenes los peores asesinos y genocidas puede germinar gozando durante toda la eternidad mientras que buenas personas, por el mero hecho de haber nacido en otro tiempo y en otra cultura diferente al rancio catolicismo deberán purgar sus “pecados” en el Infierno por toda la eternidad.
Para cualquiera que se haya leído ese conjunto de disparates pergeñado por profetas dementes de la Edad del Bronce llamado Biblia es más que evidente que ese Iahvé sería en caso de ser real y dicho diplomáticamente un hijo de p…. integral.