La secular asociación (casi mafiosa) entre los militares españoles y la santa iglesia pederasta ha llegado al sumun del esperpento patrio.
Resulta que los militares del cuartel del Bruc en Barcelona decidieron recolectar dinero para pagar las fiestas del cuartel ¿y cuál fue el ingenioso método ideado por los defensores de la patria? pues nada más y nada menos que hacer una rifa en la que el afortunado disfrutaría de la compañía sexual de una prostituta, evento que se celebraría hoy, fiesta mayor de los católicos en la que se conmemora esa estúpida tontería de que la judía adúltera no solo fue virgen antes, durante y después del parto del nazareno demente, sino que también su madre se libró de todo pecado a la hora de parirla y así esta última pudo nacer sin el oscuro pecado original que mancha a todo cristiano en el momento del alumbramiento.
Y para que todo el mundo pudiera participar los militares pusieron publicidad del evento en la cantina del cuartel, con lo que el éxito quedó asegurado.
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