Lo de los católicos nominales o sociológicos (que son la inmensa mayoría de los creyentes) sería risible si no fuera tan estúpidamente hipócrita.
La gran mayoría de los católicos pisan muy pocas veces en su vida una iglesia, generalmente cuando se bautizan, cuando se confirman, cuando se casan y cuando les hacen un funeral y poco más, porque en bodas, bautizos y comuniones de otros suelen acabar en el bar de la esquina mucho antes de que el párroco les haya dado el tostón.
Así que es absolutamente increíble que personas que le tienen tanta aversión a su religión luego vayan por ahí diciendo que son católicos ¡misterios de la estulticia humana!
No hay comentarios:
Publicar un comentario