Aunque el adoctrinamiento religioso suele conllevar el adormecimiento, cuando no la simple destrucción, de la capacidad de raciocinio, a veces (incluso entre los casos más graves de infección por el siempre destructivo virus de la fe) el pensamiento crítico puede emerger y esa chispa de genialidad puede acercar al piadoso creyente al abismo del ateísmo con todo ese liberador conocimiento que conlleva, tal y como narra en este breve video Christopher Hitchens acerca del teólogo anglicano Lancelot Andrewes.
Una vez escuché una historia de un sabio (no recuerdo el nombre) que tuvo que explicar ante un tribunal religioso la "terrible" herejía de porque él pensaba que la sangre circulaba dentro del cuerpo humano, después de atreverse a usar un cuerpo muerto para hacer ese estudio. El biólogo poco a poco fue explicando de la forma más simple posible todo su conocimiento, como si le hablase a un niño (mentalmente los inquisidores lo eran) y quedaron tan sorprendidos por la exposición que el "juez" antes de dictar sentencia le dijo:
ResponderEliminar- Ud me ha explicado todo con tanta claridad y solidez en sus argumentos, que SI LA BIBLIA NO DIJERA EXACTAMENTE LO CONTRARIO, yo tendría que admitir que siempre hemos estado equivocados.