El facherío hispano está soliviantado por la aprobación en el Parlamento de la reciente ley de muerte digna, aunque no se puede entender su rechazo.
Porque al igual que otras leyes como las del divorcio, del aborto, de la reproducción asistida o del matrimonio homosexual, estos nazionalcatólicos medievales no entienden que la nueva ley sobre la muerte digna no obliga a nadie, sino que es un nuevo derecho que podrán ejercer aquellas personas que así lo deseen.
Por ello, estos descerebrados
cristianos siempre podrán disfrutar de una muerte lenta, agónica y más que dolorosa
si así lo desean, cuando su "benevolente" dios les envíe ese terrible
cáncer terminal que les irá corroyendo por dentro lenta, pero inexorablemente, hasta que llegue un día que todo su interior rebose de células cancerosasy no tengan ni un minuto sin dolor.
Pero ya verán ustedes que estos cristiano-fascistas harán lo mismo que con el resto de las leyes anteriormente indicadas, mucho protestar de boquilla, pero en caso de necesitarlas harán uso (como el diputado del PP Javier Maroto, que se dio más que prisa en casarse "amariconadamente" con su macho) y hasta abuso, como hizo en su momento el también diputado del PP y luego de otro partido de la derecha, derecha Álvarez Cascos que se divorció tres o cuatro veces de sus diferentes (pero seguro que muy cristianas) esposas.
P.D.
Pero eso sí, estos fachas sí que están a favor de fusilar al rojerío hispano aunque seamos 26 millones.
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