Una de las principales estrategias del neofascismo es utiliza las palabras a su antojo como el célebre personaje de Alicia en el País de las Maravillas.
Uno de los diálogos más certeros de la célebre obra de Lewis Carroll es cuando Alicia habla con Humpty-Dumpty:
"Cuando yo uso una palabra – dijo Humpty-Dumpty con un tono burlón – significa precisamente lo que yo decido que signifique: ni más ni menos.
El problema es – dijo Alicia – si usted puede hacer que las palabras signifiquen tantas cosas diferentes.
El problema es – dijo Humpty-Dumpty – sabes quién es el que manda. Eso es todo."
Y aunque este desencuentro podría parecer disparatado y solo apto para la ficción, resulta que su filosofía está siendo utilizada hasta más allá del abuso por ese colectivo heterogéneo de fascistas y negacionistas que en España orbitan alrededor de VOX.
Así, hace poco se ha constituido un agrupación denominada "Policías por la Libertad", que bajo la careta del respeto democrático y de ayuda a la ciudadanía se esconde (burdamente por cierto) el negacionismo sanitario más ignorante con el argumento de que la obligación del uso de mascarillas y las medidas de confinamientos son un atentado a la libertad (por supuesto de contagiar y de matar) de los ciudadanos.
Pero en el fondo es simplemente una táctica neofascista para intentar socavar el poder de un gobierno al que como siempre los franquistas consideran ilégitimo, porque estos individuos solo respetan la democracia cuando son ellos los que gobiernan.
Y así, junto con otros colectivos como "Bomberos por la Verdad", "Psicólogos por la Verdad" e "Infancia y Verdad" (cómo se puede observar son un poco repetitivos con eso de la "Verdad") se han congregado para lanzar consignas como que somos "cobayas humanas de las grandes farmacéuticas", "la falacia de los test", "los políticos son el virus", "Gobierno dimisión" o "falsos positivos, falsos test".
Y yo me pregunto cómo no se les retira inmediatamente a estos individuos la placa y la pistola, porque es más que evidente que no están capacitados para su labor y son además un riesgo por alentar a la población a que incumplan las únicas medidas que limitan la expansión de la pandemia mundial hasta que lleguen las vacunas.
Cómo es posible que limiten mi libertad individual obligándome a usar mascarilla; de la misma manera, reclamo que eliminen los semáforos porque limitan mi libertad de manejar un automóvil a 250 km/hora... si mato o lastimo a la gente, la culpa será de ellos por no quitarse de mi camino mientras ejerzo mi libertad y derecho a manejar a lo bestia... MODE IRONIC OFF
ResponderEliminarMe hace gracia esta entrada porque precisamente hace unos días comentaba con mi señora el caso de ciertos "elementos" que tuve como compañeros en el instituto. La cuestión es que estos chavales no aprobaban ni el recreo y, como es de suponer, se quedaron a mitad de camino y se salieron antes de llegar a COU. ¿Sabéis dónde acabaron todos ellos sin excepción?, pues repartidos entre las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado, Curioso, ¿verdad?
ResponderEliminarDespués de tantos años, el que más lejos ha llegado creo que es cabo 1º...