Quizás una de las prácticas más ignorantemente criminales
que ha pervivido hasta la actualidad dentro del demencial mundo de las
religiones sea la sanación
por la fe. Pero cuando alcanza su clímax de barbarie es cuando implica
a la infancia. Así, el que unos supuestamente amorosos padres sean capaces
de dejar morir a su vástago enfermo, negándole una atención médica adecuada,
porque han puesto todas sus absurdas (y por qué no decirlo dementes) esperanzas
en que el dios producto de sus alucinaciones les bendiga con una curación
milagrosa debería hacernos reflexionar profundamente sobre nuestras cobardes
sociedades que siguen postradas servilmente ante la secular superstición que
implica la religión.
Y como no, un nuevo ejemplo de este criminal comportamiento
nos viene de EEUU. Allí en la ciudad de Filadelfia existen dos congregaciones: la
"Faith Tabernacle Congregation" y la "First Century Gospel Church" que desde
hace aproximadamente un siglo llevan practicando esta particular locura consistente
en rechazar tratamientos médicos, esperando a cambio que su cruel dios tenga a
bien obrar el milagro de mantenerlos sanos. Pues bien, recientemente se
acaba de publicar que desde el año 1971 ambas sectas podrían ser
responsables de la muerte de 24 niños a los que cuando enfermaron se les privó del
adecuado tratamiento terapéutico. Por supuesto en muchos casos los criminales
padres responsables han sido o están siendo juzgados y bastantes de ellos han sido encarcelados
por el homicidio (en forma de sacrificio ritual) de sus hijos.
La "Children's Healthcare is a Legal Duty", una
asociación estadounidense dedicada a luchar contra los privilegios religiosos
que implican abusos de cualquier tipo contra la infancia, publicó
hace unos años un estudio en el que se documentaban en EEUU en el periodo
1975-1995 al menos 172 muertes de niños y jóvenes (que hubieran sido fácilmente
prevenibles por el actual conocimiento médico) porque sus fanáticos padres
practicaban esta criminal y abominable ciencia cristiana. El artículo publicado
en el año 1997 terminaba con este admonitorio párrafo que desgraciadamente a
día de hoy sigue totalmente vigente:
"Cuando la curación por fe se utiliza para la exclusión del tratamiento médico, el número de muertes infantiles prevenibles y el sufrimiento asociado son sustanciales y justifican la preocupación del público. Las leyes existentes pueden ser insuficientes para proteger a los niños contra esta forma de negligencia médica."
Pero por
supuesto, la sacrosanta libertad religiosa sigue estando a día de hoy por
encima de la vida de estos inocentes y nadie desde los poderes públicos ha
considerado siquiera que dichas homicidas creencias deberían ser perseguidas
por la ley, las iglesias cerradas y sus fanáticos sacerdotes encarcelados (junto
con los homicidas padres) por colaboración en delitos y por agrupación de
malhechores.
Estupefacto y horrorizado me quedo.
ResponderEliminarY lo más triste, ver como personas rechazan los beneficios de las sociedades más avanzadas, prefiriendo seguir viviendo en una especie de Edad Media.
Opaikea
ResponderEliminarY no olvidemos que esto no ocurre en el depauperado Tercer Mundo sino en la única superpotencia mundial.