El cómico Quequé ha bordado un video sobre libertad de expresión en el que pone en su sitio a esos miserables abogados nazionalcatólicos y a los jueces fascistas que les ayudan con sus fanáticas querellas. ¡Que lo disfruten!
No hay nadie más ignorante e inútil que aquel, que de rodillas y con los ojos cerrados busca una respuesta.
Me encanta cuando Héctor (que ya hace años que no es Quequé) llama a la Polonia como la taradita de Valladolid. Definiciones más precisas hay pocas...
ResponderEliminarDeberíamos llamarlos Ahogados cristianos
ResponderEliminarMe imagino, o, mejor dicho, presupongo que con ese nombre de (a)Polonia lleve tal rabia encima que toda la radiactividad de la cercana ucraniana "Chernóbil" la ha envenenado hasta límites inescrotables, cómo su dios al que oran pidiendo, un día y otro también, venganza contra todo infiel que use la razón del cerebro para pensar.
Pero como su dios es sordo (pues los sordos también son a su imagen y semejanza; supongo) o bien ni se le espera, ni aparece, ni ahora, ni antes, ni nunca, porque en realidad no existe y por eso no aparece; tienen que ser ellos y ella (cabecilla evangelista) las que deseen a toda costa que la blasfemia se reconozca, al igual que en las dictaduras, como delito incondicional. Se halle en un contexto u otro…Y que los chistes chistosos del circo sean dar "mamporros" y se rían los niños como antaño.
Y ya sólo por lo que declara sobre Willy Toledo, algo que sospechábamos sobradamente, sería motivo suficiente para devolverles con la misma moneda
Hala, todos castigados de cara a la pared hasta que yo me harte, que para eso soy un asco de "señora de bien"
¿Y dicen que son los que velan por los "valores cristianos"?
Más bien nos parece pura cobardía
Estamos de la palabra "valores" hasta la coronilla.
Al menos antes se conocían como "principios"; pero claro, para los Ahogados cristianos el principio sólo es el Génesis, un libro tan mítico como el Silmarillion
Nota aparte en parecido contexto
(Pero, claro, es como el término "parroquia y feligresía" que cada vez se emplea más aún siendo un sustantivo no oficial para definir ciertas localidades, comarcas, barrios o lugares. Pero si, en este parecer de origen romano se sigue empleando; los curas encantados, ya que le viene al pelo)
¿A qué viene este apunte?
Pues si en vez del uso de los nombres adecuados, como debería ser y se siguen usando otros que tienen mucha relación con las divisiones de la curia antigua (ese parásito que llegó a lomos de las huestes romanas durante la invasión de la península; y a los que habría que decirles nos pidieran perdón por la ocupación de la misma, cómo algunos mexicanos piden a los actuales peninsulares) se les favorece una y mil veces de forma solapada
(En fin; éste es un tema que da mucho qué decir)
A estos y a su cabecilla le pondría este tema musical:
https://youtu.be/WbE1QLvYgQs?si=p4B1WiH94-vLrTjP
Deberían llamarlos Ahogados Pristianos, los define mucho más
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