Si hay algo que define perfectamente la prepotente ignorancia de los cristianos, a pesar de su supuesta “alta” teología, es que sus “argumentos” son básicamente estúpidos ya que están basados en un libro escrito por ignorantes de hace milenios que simplemente querían creer en fantasías solo aptas para menores de edad con un profundo complejo de Peter Pan, individuos que no quieren crecer y enfrentarse solos, como adultos, a la realidad y a las visicitudes de la vida y por ello se encomiendan estúpidamente a un superhéroe sacado de la imaginación de algunos de los más desequilibrados miembros de nuestra especie.
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