Los creyentes en general y los cristianos en particular tienen un curioso y ofensivo modo de enfrentarse a la realidad: rezando. Y lo peor de todo es que consideran que este estúpido y insultante comportamiento les hace mejores personas y que el resto de los humanos debemos agradecer este irracional comportamiento con nuestra admiración más sincera.
Imaginen que un día van por la calle, se tropiezan y al caer se rompen una muñeca y el tobillo, quedando por tanto imposibilitados y necesitados de ayuda urgente. En ese momento acude raudo un transeúnte que ha visto lo sucedido y tras preguntar por las heridas acaecidas, le indica exultante que usted no tiene porqué preocuparse porque él, un sincero y piadoso creyente va a rezar a su dios (que siempre ha escuchado sus plegarias) desde ese mismo instante para su pronta recuperación. Tras esa declaración el caritativo creyente se aleja, sin haber prestado ayuda alguna pero feliz y ufano por haber realizado una encomiable labor, digna del mayor crédito puesto que ha puesto en manos de su dios omnipotente el cuidado de usted, pobre mortal.
Es evidente que este miserable comportamiento no sólo sería reprobable, sino que quizás sería punible puesto que es un caso evidente de omisión de socorro.
Pues este tipo de acciones son las que acostumbran a llevar a cabo la legión de ignorantes y prepotentes supersticiosos que todo lo fían a su inexistente amigo imaginario y así ellos pueden irse tranquilos a casa sin haber contribuido de manera alguna a solucionar (o al menos intentar) los casi infinitos problemas que acucian a Humanidad.
Porque si todo lo puede solucionar el dios elefante, el nazareno demente o San Agapito mártir ¿a qué narices investigar en la lucha contra el cáncer y el resto de enfermedades? ¿para qué invertir en energías renovables y procesos más eficientes? ¿quién necesita de un médico cuando un brujo (con o sin sotana) puede obrar el milagro de la sanación instantánea? ¿para qué preocuparse por el cambio climático cuando la zarza colérica le dijo a Noé que nunca más se ensañaría con la humanidad?
Es más, tal y como declara muy acertadamente Jacques Fresco en el siguiente video: si rezas eres idiota o peor aún, piensas que tu dios es idiota.
Dice el meme: "¡No puedo argumentar nada ante esa lógica!"
ResponderEliminarPorque tienen que admitir que no tiene desperdicios su razonamiento: piensa que todo es parte del "Plan de Dios" y tu único objetivo al rezar es que ese "plan maravilloso" sea cambiado... porque TÚ (un mortal engreído con el ego inflado), crees que un ser capaz de crear universos debe cambiarlo todo solo porque TÚ, que eres como un puntito casi invisible sobre una minúscula mota de polvo llamada, planeta Tierra se lo pidió. ¿En serio se creen tan importantes? Los aleluyos no tienen remedio 😔