Es irónicamente curioso que aquellos que dicen ser más fervientemente cristianos, sean sin embargo los que menos caso hacen a ese Jesucristo que siempre tienen en boca.
Porque si los creyentes leyeran (y sobre todo comprendieran) las supuestas enseñanzas del nazareno milagrero entonces el mundo probablemente sería mucho más pacífico.
Porque a pesar de todas esas "divinas" enseñanzas sobre la paz, la humildad y el pacifismo al más puro estilo gandhiano que supuestamente predicó el bastardo extraterrestre, los cristianos a lo largo de ya casi dos milenios han usado su palabra y su libro sagrado para insultar, humillar, perseguir, atacar, encarcelar, torturar y matar con una saña digna de psicópatas y genocidas, tal y como muy irónicamente indica Bill Maher en el siguiente video.
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