Si ya has tratado en tu blog el tema de cualquiera de los artículos que lees aquí, te animo a dejar en la sección de comentarios un enlace o URL que nos lleve hacia él, siempre y cuando no sea para hacer proselitismo de la superstición en cualquiera de sus variantes. Todos ganamos con el intercambio fomentando la discusión racional.

No hay nadie más ignorante e inútil que aquel, que de rodillas y con los ojos cerrados busca una respuesta.


PARA SU INFORMACIÓN: Los ateos no creemos en ninguno de los 2.700 dioses que ha inventado la humanidad, ni tampoco en el diablo, karma, aura, espíritus, alma, fantasmas, apariciones, Espíritu Santo, infierno, cielo, purgatorio, la virgen María, unicornios, duendes, hadas, brujas, vudú, horóscopos, cartomancia, quiromancia, numerología, ni ninguna otra absurdez inventada por ignorantes supersticiosos que no tenga sustento lógico, demostrable, científico ni coherente.

Red Atea

Red de blogs AteosMagufos, Blogs de escepticismo y ciencia

Buscar este blog

19 de abril de 2021

Un monje budista se decapita para complacer a Buda

Que los verdaderos creyentes están como un cencerro es algo más evidente que la luz del Sol. Y si no atentos a la suicida estupidez de un monje budista.

 

El susodicho, un tal Thammakorn Wangpreecha de 68 años decidió en su soberana estupidez complacer a su reverenciado Buda y ni corto ni perezoso usó una guillotina improvisada junto a una estatua de un dios budista para que la figura religiosa pareciera sostener su cabeza después de su decapitación. ¡Macabro a más no poder!

El idiotizado monje dejó una carta justificando su suicidio planeado durante 5 años porque

"Cortarse la cabeza era su forma de alabar a Buda."

Pero no se preocupen deudos y familiares porque este demente ofreció su suicidio a Buda con la esperanza de reencarnarse como un "ser espiritual superior", una creencia conocida en el budismo como "hacer méritos".

Así que ya saben, un tonto menos. Pero eso sí, santifiquemos las inviolables creencias. 

 


 

No hay comentarios:

Publicar un comentario