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7 de julio de 2014

Las sectas cristianas causan una crisis sanitaria en Zimbabue



Desastrosamente la famosa y suicida “sanación por fe” se extiende cada vez más por todo el mundo. Y es en los países más pobres y atrasados donde por desgracia está arraigando con más fuerza esta criminal manipulación de los más ignorantes de nuestros congéneres.

Así en el pequeño país africano de Zimbabue hay miles de personas adeptas a los cultos más fanáticos e intransigentes de la poliédrica cristiandad. Y estas sectas suelen tener por bandera la más rigurosa literalidad de ese infortunado libro, resultado de las alucinaciones de unos ignorantes hebreos perdidos en la noche de los tiempos, que es la Biblia. Y como en ella se comenta mentirosamente (aunque eso es del todo indiferente para los alineados seguidores del nazareno extraterrestre) que Iahvé, de vez en cuando (en realidad en escasísimas ocasiones a tenor de lo que cuenta la propia Biblia) se apiada de sus pobres seguidores, eliminando milagrosamente alguna de la infinidad de ponzoñosas enfermedades que en su infinita sabiduría y ¿bondad? tuvo a bien inventar para torturar por los siglos de los siglos a esta siempre díscola y pecadora humanidad, con un milagrito sanitario (eso sí siempre después de infinidad de ruegos, súplicas y años y años de sufrimiento y postración, porque como decía muy sabiamente mi anciana abuela "a este mundo se viene a sufrir y a penar") para uno de sus miles de millones de dementes seguidores (por cierto con una probabilidad estadística infinitamente menor que la de acertar la lotería 10 veces seguidas) pues entonces ¿para qué acudir al médico, que seguramente es un hereje o lo que es peor un ateo y así condenarse a las calderas de Pedro Botero por toda la eternidad? 

Pues esto mismo es lo que piensan miles de seguidores de las más variadas sectas apostólicas en la atrasada nación zimbabuense, con el inexorable resultado de cientos de muertos por falta de asistencia sanitaria. Y como siempre, quien se lleva la peor parte de esta insana creencia son madres gestantes y sobre todo los pobres niños, hijos de esos fanáticos padres cristianos que rezan y rezan sin parar a ese siempre esquivo y malévolo diosecillo del desierto palestino en busca de una curación milagrosa que inevitablemente nunca llega. Pero eso sí rindamos el debido y arrobado respeto a las sacrosantas e inviolables creencias cristianas. 


2 comentarios:

  1. Matizo algunas cosas. Los unicornios existen, solo que no son ungulados sino cetáceos y viven en el mar. También se llaman narvales y su nombre científico es Monodon monoceros. El aura no existe, pero se ve. Es una ilusión óptica de la que puede disfrutar cualquiera que siga las adecuadas instrucciones. Algunos aspectos del vudú funcionan. Lo explica perfectamente Lars von Trier en su película "Rompiendo las olas". Solo que en ella el que hace de "mago" es un pastor protestante.

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  2. Los narvales no tienen cuerno es un diente.....

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