Como lo oyen. Un judío norteamericano educado en el más
estricto hasidismo ultraortodoxo, pero que abandonó la fe y en la actualidad es
un ateo convencido decidió subastar en eBay su plaza reservada en el cielo y
regalársela al mejor postor puesto que ya no iba a hacer uso de la misma.
Y no se crean, que aunque la puja comenzó por 99 centavos de
dólar como una broma del ateo renacido, rápidamente varias docenas de personas
se incorporaron a la subasta que finalizó con la asombrosa cantidad de ¡100.000
dólares!.
El problema es que ahora eBay ha comunicado que no está
permitido subastar bienes intangibles, por lo que nuestro bromista ateo recién
enriquecido no va a poder disfrutar de tan merecido premio. Lo cual es
totalmente injusto puesto que si se deja que los sotanados de cualquier
religión trafiquen con bulas, perdones, indulgencias y demás mercadería
espiritual no entiendo porque este avispado norteamericano no puede él también
enriquecerse con la ignorancia y la estulticia de los creyentes.
Finalmente les dejo con la foto de nuestro particular protagonista en su anterior etapa irracional
Pues que no la venda por ebay y la subaste públicamente en el típico almacén de subastas donde vayan todos los interesados.
ResponderEliminarMenuda ganga , solo 100.000 una plaza para toda la vida!!!
ResponderEliminarMuy divertido. Aunque ha hecho el peor negocio de su vida. En cuanto a su "anterior etapa irracional" nada nos garantiza que ésta sea realmente "anterior" y que no se haya prolongado hasta el presente. De hecho creeer en Dios no tiene nada de irracional.
ResponderEliminarJuan
Juna
ResponderEliminar"De hecho creer en Dios no tiene nada de irracional."
Tan irracional es creen en dios (¿en cual?) como en el ratoncito Pérez.
Estimado Juna,
ResponderEliminarLo del Ratoncito Pérez es gracioso. Se lo concedo. Pero no veo un argumento racional en su comentario. El cual consiste en una comparación bastante simple, basada en lo irrisorio del roedor Pérez. Símil que, por cierto, es un recurso retórico medianamente eficaz. Pero no es un argumento de real valor lógico, que lo que esperamos los lectores de este blog. En esta jugada, al menos, lo irracional no estuvo del lado de los creyentes.
Juan.
Georg Wilhelm
ResponderEliminarPues no es tan difícil de entender. El ratoncito Pérez es una creencia irracional que se inculca a los niños pequeños, lo mismo que el ángel de la guarda y ya puestos toda la parafernalia católica. Luego lo mismo que los niños dejan de creer en el roedor sobre los 7-9 años, deberían de dejar de creer en ángeles de la guarda, santos y beatos, vírgenes y palomas y demás supersticiones religiosas.
Estimado Ateo666666,
EliminarParece que tenemos un problema: dice Ud. que lo del Ratoncito Pèrez no es "difícil de entender". Tiene Ud. razón. Pero, el problema es que ése no es el punto (la dificultad de entender). El punto al que yo me refería es que el símil de la creencia en el Ratoncito Pérez y Dios, no es un argumento realmente es un tropo. Su posteo, estimado Ateo666666, discute algo que no estaba en discusión (la dificultad de entender) y eso se llama ignoratio elenchi. Estamos dando una pésima impresión a los partidarios de la supercherías, pues esta vez tampoco lo irracional estuvo del lado de los creyentes.
G.W.