El gran problema de la religión es que, además de destruir
la capacidad de raciocinio del creyente, desinhibe completamente al piadoso ignorante
hasta tal punto que personas teóricamente cultas, y supuestamente inteligentes
por haber cursado estudios superiores, son capaces de dejar constancia escrita para
la posteridad de su estulticia religiosa sin el menor asomo de duda o vergüenza.
Así el
último ejemplo (pero mucho me temo que no será el último de esta
disparatada mezcla de ignorancia, prepotencia y desinhibición debida al virus
de la fe) acaba de ser mostrado al mundo por nada más y nada menos que por Ramón
Rodríguez Arribas, licenciado en derecho, juez y actual vicepresidente del
Tribunal Constitucional español. ¿Y que ha escrito nuestro insigne alto
representante público y uno de los garantes de la Constitución española, en la
justificación de su postura legal sobre la reciente sentencia del alto tribunal
que avala la Ley del Matrimonio Homosexual y rechaza el recurso que, contra la
misma, presentó el PP? Pues transcribo literalmente una de sus principales argumentaciones
contra dicha ley
"además de todos los componentes jurídicos del matrimonio, éste es también una unión sexual que la Naturaleza destina a la perpetuación de la especie humana"
Es decir, en lugar de centrarse en los aspectos legales y
jurídicos del tema tratado, en los que se le supone profesionalidad y criterio,
pues se embarca (imagino que azuzado por su fanática necesidad de desacreditar
una ley que le repulsa como seguidor incondicional de unos bárbaros pastores de
cabras del desierto judaico) en una absurda argumentación biológico-antropológico-evolutiva
en la que al final únicamente demuestra su total ignorancia y que además hace
constar por escrito en su valoración de la sentencia. Porque mira que después
de ochos años de estudio sobre el caso, no habrá tenido tiempo suficiente para
meditar, razonar e incluso preguntar a un antropólogo o ya puestos, a cualquier
estudiante universitario de biología sobre la esencia de la especie humana y
evitarse así el mal trago de mostrar al mundo su prepotente ignorancia. Porque
si hubiera preguntado, este fósil viviente se hubiera enterado (para su
asombro) que nuestra especie (el
homo sapiens) lleva viviendo y reproduciéndose sobre la faz de la Tierra
unos nada despreciables 200.000 años, de los cuales en la inmensa mayoría de
ellos el concepto de matrimonio (y no digamos ya nada del cristiano tan fervientemente
defendido por nuestro arcaico magistrado) ha estado totalmente ausente. Pero
pelillos a la mar, si la Biblia dice que dios instauró el matrimonio (aunque yo no
recuerdo el pasaje en el que Adán y Eva se casaran) pues será que es verdad,
habrá razonado nuestro portentoso intelectual togado.
Pero claro, quizás yo esté pidiendo demasiado a un
cerebro carcomido por la estulticia religiosa de las palomas fecundadoras de
vírgenes judías (por cierto menudo ejemplo de matrimonio), las zarzas ardientes
que expulsan a unos pobres analfabetos (comedores de manzanas prohibidas)
engañados por una serpiente parlanchina y demás cuentos inventados por unos pobres
y aburridos pastores de ovejas para acompañarse en las largas y frías noches de
soledad del desierto palestino.
Lo dicho, nada es capaz de superar en
analfabetismo mental al creyente convencido de su absurda e irracional verdad.
P.D.
Si hasta el retrógrado Homer Simpson fue capaz de oficiar
una boda entre homosexuales, señores fanáticos religiosos hagan el favor de
evolucionar aunque sea sólo un poquito.
De los creadores de "El matrimonio lo inventó Jesús" llega "(El matrimonio) es también una unión sexual que la Naturaleza destina a la perpetuación de la especie humana".
ResponderEliminarY luego, haciendo memoria y tirando de hemeroteca uno se encuentra con esto:
http://archivo.dosmanzanas.com/index.php/archives/4615
JavitoMan
ResponderEliminarMuy buena la noticia. Y para añadir un dato más en esta linea, que confirma la absurda locura de los sacerdotes ya hace algún tiempo en la siguiente entrada
http://diario-de-un-ateo.blogspot.com.es/2011/08/perros-cristianos.html
denuncié que un sacerdote anglicano canadiense de una iglesia de Toronto, amante de los animales, ofrece la "sagrada forma" a animales de compañía, principalmente perros.
Parafrasenado a Asterix, están locos estos creyentes.
Vamos a ver,yo soy totalmente ateo,pero esto es una estupidez.Es como los capillitas que se niegan a entender que dios no existe.La naturaleza ha hecho al hombre y a la mujer así por alguna razón,y si no miraros la entrepierna.
ResponderEliminarLa homosexualidad no deja de ser un trastorno de personalidad,¿o acaso ahora vamos a poder casar a un cura pedófilo de mierda con un pobre niño?,solo es otro caso de enfermedad mental.Recuerdo que había una mujer que se quería operar para quedarse paralítica porque tenía un trastorno que le hacía querer y creer serlo.Vosotros diréis "Y con la de hambre que hay en el mundo,va a haber gente que se gaste dinero en una operación de esas,que no es barata,por un problema mental?Lo mismo con los maricones.
Ahora dejad de quejaros por estupideces,si habeis nacido hombre o mujer es lo que hay,estáis hechos así por algo,si quereis ser del otro sexo ingresad en un psiquiátrico.¿O acaso vamos a dejar suelto a los maricones como dejamos sueltos a lo curas?.No nos queramos parecer a la Iglesia,por favor.
ResponderEliminarUnknown
Por favor antes de decir tamañas burradas piensa y sobre todo infórmate un poco. La homosexualidad es simplemente otra opción sexual tan normal como cualquiera y si me apurar un compoortamiento natural tan relevante y evolutivamente adaptado como la heterosexualidad.
Tienes razón,puede que me halla exaltado un poco,pero yo si fuera homo no me vería representado por una bandera arcoiris y una panda de salidos vestidos de tapapezones y lentejuelas haciendo una manifestación del orgullo gay.Si uno es así,que viva y deje vivir,pero no me hace mucha gracia que estén exigiendo por sus derechos y luego degradándose de esa manera.Ahora sí,MI OPINIÓN es que esa "condición no deja de ser una especie de parafilia o fetichismo,o si no ahora que también se casen los necrófilos o zoofílicos...
ResponderEliminarUnknown
ResponderEliminarEstás mezclando dos cosas muy diferentes: una son los derechos de una persona y otra es tu subjetiva visión de ella. Un individuo puede ser zafio, grosero o maleducado pero aún así tiene todo el derecho del mundo a no ser discriminado y a que se le trate de manera igualitaria ante la ley. Así que el que a ti te sorprenda o te ofenda el comportamiento de unos homosexuales en el día del Orgullo Gay no le quita ninguna legitimidad a sus reivindicaciones. Sería algo parecido a juzgar a las personas que se disfrazan, emborrachan y se desinhiben en una fiesta de carnaval y utilizar ese comportamiento festivo y puntual para discriminarles o perseguirles.
Bueno,tienes razón.Ahí me he pasado.Nadie merece ser discriminado por ninguna razón.Me has hecho abrir los ojos respecto a este tema.Gracias.Pero lo que yo digo es que uno puede ser homosexual y educado,quiero decir,no todos los que salen en esos desfiles representan esa orientación sexual.
ResponderEliminarAunque,según tu argumento,aunque todos los religiosos del mundo sean ignorantemente osados,tampoco pueden ser discriminados,¿no es así?Quiero decir,estoy de acuerdo contigo,pero me parece que ahí te contradices.
ResponderEliminarUnknown
ResponderEliminarEn múltiples entradas del blog siempre he defendido el derecho individual de un adulto de creer en lo que le dé la gana: dioses, vírgenes, elfos, gnomos, el ratoncito Pérez o Caperucita Roja. Lo que pasa es que entiendo que si un adulto cree en el ratoncito Pérez, en una zarza ardiente que habla con un esclavo egipcio, en un dios con forma de elefante o se comunica con los espíritus del más allá es señal inequívoca de un serio problema neurológico o psiquiátrico que debería ser tratado adecuadamente por profesionales médicos especializados.
En cambio estoy absolutamente en contra y de ahí este blog es que estos individuos crédulos y/o enfermos IMPONGAN sus creencias al resto de la sociedad mediante el adoctrinamiento infantil, los privilegios religiosos tanto económicos como sociales y políticos y que con su supersticiosa y obtusa visión del mundo emanada de oscuros libros escritos por ignorantes pastores de cabras coarten la libertad de los ciudadanos del siglo XXI, cercenen el desarrollo científico e intenten hacernos vivir como en la Edad Media.
Vale,entonces es justo lo que yo opino respecto a ellos,que intenten meternos en la cabeza que existe la vida después de la muerte cuando hay científicos que han dedicado su vida a el estudio de que el alma no existe,si no que son los impulsos eléctricos producidos por el sistema nervioso,que les ha costado muchísimo trabajo averiguarlo y ahora venga este gobierno de ladrones a dar clases de religión en los colegios(sin preguntar ni nada,ahí a meter a todos en un mismo saco) y a decirnos en pleno siglo XXI que todavía existe la vida después de la muerte,como si tantos años de investigación científica no hubieran servido de nada,como si despreciaran su trabajo en favor de un libro cuyo máximo uso es el de estar expuesto en un museo de arquelogía,junto a las muchas culturas destruidas gracias a ellos...
EliminarEs que es surrealista,la verdad.
De hecho,hay científicos que trabajan día y noche en buscar la verdad mediante tesis,experimentos,etc...
EliminarY los caguetas creyentes se niegan a aceptar LA ÚNICA VERDAD.