A veces una secuencia cinematográfica puede demoler milenios de esa absurda y disparatada "alta teología" que lleva enredando la mente de aquellos miembros de nuestra especie menos sapiens.
Porque estos 40 segundos son más que demoledores
contra esa absurda creencia que tienen muchos humanos de pensar que aunque
sufran las mayores desgracias, sin embargo hay una deidad benevolente que se
preocupa por ellos y les guarda un sitio privilegiado en ese absurdo lugar
llamado cielo. Eso sí, después de haberles hecho sufrir inimaginablemente.
No hay comentarios:
Publicar un comentario