La obsesión de EEUU por la seguridad y la amenaza del
terrorismo islámico ha producido una curioso resultado, la agencia encargada de
perseguir a esos iluminados islamistas capaces de suicidarse en nombre del
profeta pederasta la llevado su celo al extremo de alentar los delirios de musulmanes
estadounidenses con problemas de salud mental para que se radicalicen al máximo
y facilitarles los medios para cometer atentados para al final poderlos detener
y asi justificar sus detenciones, tal y como lo revela en este video el periodista
de investigación estadounidense Trevor Aaronson.
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Red Atea
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