El actual sistema económico mundial, con su perpetua búsqueda
de la novedad a toda costa, arrastra a la población a la compra compulsiva de
objetos que lejos de ser el resultado de una necesidad, simplemente se
adquieren por un capricho momentáneo, que al poco tiempo deja insatisfecho a
ese consumidor que cae en la redes de la obsolescencia programada.
Y este
proceso además esquilma los recursos naturales y destruye los pocos ecosistemas
vírgenes que cada vez escasean más en un mundo superpoblado de humanos,
únicamente para que los occidentales podamos seguir comprando la nueva versión de
esos juguetitos electrónicos, que nos aíslan
cada vez más en una inmensa burbuja cibernética y que permiten seguir
manteniendo la estratosférica cuenta de resultado de las grandes
transnacionales.
Muy adecuado poner un vídeo que ha caducado... :-P
ResponderEliminarNo estába caducado era que se me había olvidado activar la opción de "público".
ResponderEliminarAhora ya se puede ver
La triste verdad, pero solo enseñar ciencias y tecnología en la escuela, creo yo, solo acrecentara el problema ¿Qué cosa podría salvar a la gente de esto?.
ResponderEliminarOjo. No quiero decir que sea la religión, esa, estoy totalmente a favor de debe desaparecer.
Pienso que en la escuela hay que enseñar a pensar, enseñar racionalismo, análisis, crítica, etc. La ciencia es sólo una herramienta.
ResponderEliminar