Ahora que la principal fortuna de España, Amancio Ortega ha decidido hacer un acto de
caridad con la más que necesitada sanidad pública española es quizás hora de
una pequeña reflexión.
Sr. Ortega si usted hubiera pagado sus impuestos en la misma
proporción que hacemos los trabajadores: entre el 20 y el 40% de nuestro sueldo bruto, en lugar de
tanta ingeniería financiera, SICAV
varias (en donde esconde su patrimonio) y las deslocalizaciones de sus empresas a esas naciones
del Tercer Mundo, en donde esclaviza sin ningún tipo de derecho laboral a los más desesperados no habría necesidad
de caridad ninguna.
Pero queda muy bonito, y más que hipócrita, que después de robar a mansalva
durante décadas y defraudar miles de millones de euros, reparta usted de vez en
cuando unas migajas para acallar su conciencia y ganarse de paso la estima de los simples.
Totalmente de acuerdo con tú exposición.
ResponderEliminarEntre los mafiosos es frecuente este lavado de imagen para engañar y confundir.
Desde tiempos inmemoriales ha sido la conducta de los más diversos rufianes que han poblado
la tierra.
Hola:
ResponderEliminarAcá también se suelen coludir con estos actos "filantrópicos" los medios de comunicación como la prensa escrita o la televisión.
Como la gente fue educada en que pensar y no en como pensar la mayoría acepta lo que se les informa, no son capaces de leer entre líneas porque no les interesa cuestionar, pero si dejarse guiar como ovejas. Les interesa más el dulce engaño que la cruda verdad.
Lo más lamentable son los beneficiarios que sólo se conforman con las migajas y que más encima tienen por el "prohombre" mayor estima.
Saludos.