El siempre todopoderoso filofascismo que corrompe hasta la medula
este desgraciado país llamado España ha vuelto por sus fueros. La "Asociación
para la defensa del Valle de los Caídos", un grupo de fascistas que
estaría disuelto y perseguido judicialmente en cualquier democracia civilizada
se ha permitido denunciar
al periódico digital Eldiario.es.
El motivo ha sido un reciente artículo de opinión publicado en este medio de comunicación en el que, con motivo del aniversario del golpe
estado fascista que desencadenó una terrible guerra civil y llevó a España a 40
años de represión, torturas y exterminio de la oposición, el periodista del
"The New Yorker" Jon Lee Anderson declaraba que
"sería conveniente reconciliarse con la historia, y, en un acto solemne, con la aprobación del Parlamento, volar con poderosos explosivos ese monumento a la brutalidad que se llama Valle de los Caídos.Allí, entre los escombros de ese lugar tenebroso, España finalmente podría tener su monumento nacional: un sitio en donde no sólo los verdugos serían recordados, sino también sus víctimas."
Y por
supuesto esta petición es del todo intolerable para esos neonazis que saben que
aquí en España no puede haber nunca, no ya justicia, sino el más mínimo viso de
democracia.
No es de extrañar todo esto si, para colmo, hay alcaldes como el de la ciudad de Vigo que, llamándose socialista, es capaz de mantener una cruz (de las más grandes) filofascista a la que dicen desposeyó de todo símbolo de ese tipo sólo para mantenerla y así obtener el fervor y voto del clero en general, femenino y masculino...y del otro, claro, que los hay.
ResponderEliminarLa primera ofensa que hace a las víctimas, ésas que piden les devuelvan lo suyo que les quitaron y aquellos que desean les sean curadas así la herida; va este tipo y sostiene (con ayuda de jueces) que al desposeer a tal mamotreto (no es otra cosa) se limpia para consuelo de muchos (los que no perdieron nada) omitiendo o solapando o escondiendo que esa misma cruz, en sí misma y monolítica fue tan secuaz como ellos al dejarse poseer de tanto simbolismo de entonces político. Quién calla otorga, o sí.
Claro está que así revela su posición, ambigua por otro lado y conveniente, para demostrar que este país -ante los ojos de otros a los que llaman nuevos invasores callados con sus religiones que regresan- se percaten de la posición religiosa que toman y desean demostrar. ¿Y algunos se llaman socialistas?
No ha mucho una de Comisiones me dijo: - Yo soy cristiana, pues creo que la figura y las enseñanzas del tal...
¿Qué, cómo cuál? ¿Pero es que aún sigues creyendo en princesas y genios en botella? Descabalga y no te contradigas con lo que defiendes; o mejor, déjalo y pásate a Csit.
Así, si alguien es capaz de desempolvar algo para simularlos de la supuesta carga y ofensa que estos mismos dicen no deberían tenerla, no es de extrañar la defensa acérrima que sobre esa desfachatez tienen.
Cierto, en otro país cualquiera eso ya hubiera sido desmantelado hace mucho y así redimir el equilibrio perdido y no un escarnio constante para quienes fueron humillados y masacrados luchando, en todos los aspectos, por la libertad que durante más de cuarenta años aún no se ha conseguido.
Un autor expuso que: "la propaganda de los vencedores se convierte en la historia de los vencidos".
Y siendo así no es de extrañar cómo van las cosas en este país en el cual los que piden cerrar heridas son justamente quienes no las sufrieron y los que las pasaron aún las conservan porque nadie se las cura. Contradicciones que no son de extrañar cuando a las personas que por algún motivo han violado muchas sentencias dejan libres a sus verdugos.
Así nos va