¿Qué pasaría si en los últimos meses hubiesen sido
asesinados cerca de 30 opositores venezolanos? Muy seguramente todos y cada uno
de los líderes del PP, Ciudadanos y del PSOE, junto con los medios de
comunicación "serios" de este país solicitarían una invasión inmediata
bajo paraguas de la OTAN, de la ONU o de quién fuera necesario para acabar con ese régimen
bolivariano asesino y criminal.
Sin embargo al lado mismo de esa
Venezuela que está en el ojo de la política y la opinión pública de España,
resulta que existe otro olvidado país llamado Colombia (una supuesta democracia de impecables referencias neoliberales) en donde se está asesinando impunemente
a todo tipo de opositores, sindicalistas o líderes campesinos y por supuesto aquí
en España ni el "concienciado" Albert Rivera (que acaba de descubrir que existe
una cosa llamada derechos humanos), ni el gobierno del PP que lleva años
"preocupado" por la situación en Venezuela, ni el "demócrata" Felipe González,
ni por supuesto periódicos de "prestigio" como El País, la Razón o el
ABC parecen haberse enterado, aunque se supone que tienen corresponsales y periodistas especializados.
¿Y cuál es esa misteriosa razón por la que nuestros biempensantes
no se han enterado de esta terrible situación? ¿Será porque Colombia está demasiado
lejos o porque no tenemos relación alguna con ese extraño país? Pues no, la respuesta es mucho más prosaica. Es nada
más y nada menos porque todos esos muertos son unos simples pancarteros y perroflautas que
luchan por la justicia social. Y muy seguramente esa "democracia" colombiana es la que quieren implantar en Venezuela nuestros preocupados politicos españoles.
Y ya sabemos que en este país, corrompido hasta la médula por el filofascismo, es mucho más importante el que un par de prohombres de derecha, gentes de bien de toda la vida estén en arresto domiciliario o encarcelados ¡qué horror, que paren el mundo! por pedir el derrocamiento (por las armas si fuese necesario) de un gobierno elegido democráticamente que la sangre de decenas de más que "sospechosos" izquierdistas, que han tenido la osadía de intentar cambiar este depredador y explotador sistema actual que asfixia a miles de millones de personas.
Así que bien harían Rivera y González en correr raudos y veloces a Colombia a defender esos derechos humanos que parece que tanto les preocupan y a llorar de verdad por esos muertos y por los que irán cayendo en la próximas semanas y meses. Pero claro, tengan por seguro que este par de impresentables demagogos no sólo no van a ir, sino que ni siquiera nadie les espera en ese tan castigado país.
Finalmente les dejo con esta reveladora declaracíon de un eurodiputado francés en el debate sobre Venezuela celebrado hace poco en el Parlamento Europeo.
Pero si ni se preocupan por los derechos humanos en nuestro propio país, ¿cómo se van a preocupar por otros?
ResponderEliminarImaginaos la que se hubiera liado si en Venezuela se aprobara la ley mordaza.