Históricamente la religión se ha asociado a un mejor
comportamiento y a una vida más sana, alejada del consumo de drogas o alcohol,
pero parece que en realidad la hipocresía es la norma fundamental de los
creyentes y por tanto no hay que tener muy en cuenta su autoproclamada bondad.
Recientemente un grupo de investigadores estadounidenses ha realizado un curioso experimento social. A un conjunto de estudiantes universitarios estadounidenses se les
preguntó acerca de su religión y sobre su relación y problemas con el alcohol
con una pequeña diferencia. Mientras a la mitad de los individuos elegidos de
manera aleatoria se les preguntó primero sobre su religión y después sobre su
consumo de alcohol, a la otra mitad se les invirtió el orden de las preguntas, y
respondieron primero acerca de su relación y sus problemas con el consumo de
bebidas alcohólicas y luego después se indagó sobre sus creencias. Y los
resultados son bastante interesantes. El grupo que contestó primero las
cuestiones sobre su religión indicó que bebía menos y que tenía menos problemas
con el alcohol (borracheras, dependencia, etc.) que aquellos que contestaron al
final las preguntas sobre su religión.
La conclusión es evidente, los universitarios
estadounidenses (al menos) tienden a mentir más cuando se relacionan con la
religión. Así que a partir de ahora cuando aparezca un nuevo estudio o el
creyente de turno presuma de lo bueno, caritativo, sano y empático que es con
el resto de sus semejantes bien haríamos en mostrarnos racionalmente
escépticos.
Lo evidente es que luego con llegarse al confesionario -ese antiguo invento medieval de control de la sociedad local- a exculparse de sus pecados ya les llega. Se hacen tal lavado de conciencia y con eso de que su dios se lo perdona todo y es tan bondadoso que la próxima vez que se agarren una melopea sólo tienen que encomendarse al altísimo o a san Antonio abad para que se les pase. Seguramente san Beodo mártir está hasta las narices de cargar con sus ebriedades.
ResponderEliminarEn fin, no era necesario el estudio pues esto ya se sabe desde siempre y el porcentaje aún es mayor que el descrito.
Cuántas feligresas encandiladas con el joven y recién nombrado párroco, antes coadjutor, se preguntan del porqué no haberlo conocido antes. Estos sí son estudios que no están en manos de esos pero algún día saldrán y nos echaremos unas risas diciendo aquello de: - Te lo dije, qué...había fin del mundo o no, eh... (pues no) Pero dele tiempo, dele tiempo.
En fin, este chascarrillo no es trivial si no el reflejo de lo que se esconde tras las rejillas de sus sacroparalelepípedos y que martiriza a ambos; la que confiesa y a su oyente que sumido en el debacle mental baila en un maremágnum de dudas inaguantables... Ora reza, ora ora y labora encomendando su fortaleza a la voluntad divina que finalmente termina por dejarlo solo doblegado a su encomiable instinto humano al que de antemano rechazó.
Cuantas más prohibiciones mayores son los deseos de romperlos como barreras de ese libre albedrío del que tanto alardean.
Para amar y, entre otros muchos ejemplos de los que hablar, estar con alguien de por vida no hace falta religión, ni espiritualidad, alguna; sólo una educación basada en el respeto, en la constancia, en el mutuo acuerdo, en la responsabilidad de haberlo vivido con la enseñanza de la realidad palpable sin palabras del día a día. Los cuidados ofrecidos a una persona son sólo parte de un aprendizaje que se mama en el seno familiar independientemente de su condición civil que normalmente es fruto de la convivencia y del diálogo de gesticulaciones que van más allá de la fonética. Hechos, no dichos. Y para eso no hay nada como no prohibir para evitar ansiedades y curiosidades que despiertan el morbo escondido de los crédulos al verse envueltos en mundos que les son tan distantes que incluso les parecen exóticos; luego, lo atípico llama tanto la atención que los desborda. Pero esto es a escala mundial...aunque en estos su falta de habituación los desequilibra hasta el punto de no saber si les es mejor, lo que piensan normalmente, una mentira piadosa o verdad a medias (tópicos a los que recurren habitualmente) que una rotunda...Luego, si eso -cómo dice Mota- ya se confesará y a otra cosa mariposa.
La honradez verdadera al carecer de puritanismos no se agobia ante nada y sin tapujos expresa mejor y más moderadamente el hilo de la vida con la normalidad que suponen todas y cuantas cosas hay en ella. Haciendo uso de éstas de tal forma que no les suponen una carga las preguntas a las que la respuesta es la siempre la misma, cierta.
Saludos.
Ya hemos tenido que escuchar sobre que la religión es necesaria para determinar la moral de una sociedad y que existen muchos ejemplos de esta moral en los libros sagrados. Parece que para el religioso ser bueno depende de su religión y del miedo al castigo. Ahora, si una persona precisa de una religión para ser buena, sin dudas esta persona no es buena, es simplemente un animal amaestrado.
ResponderEliminarUna persona sólo puede ser considerada buena cuando su condición es buena y no reprimida.
·el creyente de turno presuma de lo bueno, caritativo, sano y empático que es con el resto de sus semejantes
ResponderEliminarUn cristiano que presuma de eso ya es sospechoso de ser poco cristiano.
·no hay que tener muy en cuenta su autoproclamada bondad.
En general no, pero hay mucha bondad en muchos creyentes, y no es hipocresia. Generalizar como usted hace me parece sesgado. Hay y ha habido actitudes encomiables, y eso está fuera de toda duda. También hay actitudes encomiables en muchos ateos, es decir hay ateos evangelicos y creyentes no evangelicos.
La hipocresia y la falta de humildad es tal vez propia de muchos de los que se AUTOPROCLAMAN creyentes, pero eso es consecuencia no de la creencia en sí misma, sino del hecho de que hay mucha autoproclamación y poco transfondo de verdad en la práctica de tal autoproclamación. Dicho de otro modo, su critica indica que hay mucho creyente de palabra y pocos de hecho, o que hay mucho creyente cristiano poco evangelico.
Un saludo.
Enric hay dos tipos de creyentes: los verdaderos que obviamente están más que locos puesto que creen hablar o recibir atenciones de entidades imaginarias y los hipócritas, que no se creen para nada las estupideces bíblicas pero que hacen como si fueran ciertas mientras no hacen caso alguno a las directrices de su religión.
ResponderEliminarPara ser creyente, uno tiene que creer en alguna escritura anterior a la cual se le dé una importancia moral, más allá de la realidad objetiva. Una norma moral que determina su condición de comportamiento. Por ser así, su conducta es determinada por leyes supuestamente escritas por algún ser humano alucinado que creía que sus pensamientos y delirios eran guiados por un contacto telepático con un ser superior extraterrestre. De ser así, nosotros los Ateos, intentamos avisar que seguir los delirios de alguien no puede ser considerado. Pero, por creer en delirantes, y afirmar cosas que no poden comprobar, pela duda de que dichos delirios sean reales, los torna hipócritas.
ResponderEliminarSi un creyente se manifiesta como bondadoso basado en su moral delirante, este en su íntimo no es bondadoso, es un hipócrita, porque lo que hace lo hace porque alguien lo está observando y recibirá una recompensa por sus actos.
No se entiende muy bien esa afirmación de que “hay ateos evangélicos”. ¿es más un delirio?.
· hay dos tipos de creyentes: los verdaderos que obviamente están más que locos puesto que creen hablar o recibir atenciones de entidades imaginarias...
ResponderEliminarBueno esa es una clasificación muy personal suya, que no comparto. Ya le dije que el creyente no es un loco, y eso es obvio. Ningún psiquiatra considera loco a los creyentes ( pero sí a ciertos modos de vivir la creencia)... pero me temo que usted lo tiene muy claro y no voy a convencerle de lo contrario. Obviamente, tal vez esté usted usando el término "locura" de manera metáforica, para mostrar desde su perpespectiva lo absurdo de la creencia... en ese caso, aunque no comparto tal perspectiva, tal metáfora es coherente con su ateismo. Pero repito, tildar sin más la creencia de "verdadera locura psiquiatrica" me parece un desatino, lo siento.
Respecto al tema de la entrada: ¿No cree que si en vez de preguntar previamiente por la religiosidad, les preguntasen si son ateos, o hombres de ciencia, o feministas, o de ideologia X, o del equipo de futbol Y...la respuestas que dieran a según que segunda pregunta estaría correlacionada con la contestación dada a la pregunta previa?.
Que alguien diga ser creyente, y despues se le pregunte acerca de actitudes que dependen de esa misma creencia , hace que sus respuestas sobre tales actitudes, estén muy probablemente correlacionadas con lo que supuestamente él espera debe ser la actitud de un buen creyente. Haga a modo de ejemplo el siguiente experimento:
Pregunta primero a alguien si cree que ha sido buena la educación ética recibida, y luego pregúntele si cree que es necesario volver a establecer en nuestra sociedad la pena de muerte... ya verá como descubrirá que aquellos a los se les ha preguntado previamente la primera pregunta y la han contestado afirmativamente, son hipocritas, siguendo la directrices experimentales que mostraba en su entrada. Concluyamos pues, que poner en juego previamente "que la persona tienen buena educación ética" hace a las personas más hipócritas.
Un saludo
"Bueno esa es una clasificación muy personal suya, que no comparto. Ya le dije que el creyente no es un loco, y eso es obvio. Ningún psiquiatra considera loco a los creyentes ( pero sí a ciertos modos de vivir la creencia)... "
ResponderEliminarNo entiendo porqué es obvio que una persona que dice ser Napoleón o un extraterrestre es considerada enferma mental y tratada por psiquiatras mientras que otra que dice ser el Mesías, la reencarnación de Buda o que dice hablar con el Espíritu Santo o con San Apapurcio se considera cuerda. Ello simplemente demuestra que la psiquiatría debe romper de una vez por todas las cadenas de la religión.
http://lacienciaysusdemonios.com/2014/04/08/la-psiquiatria-debe-romper-las-cadenas-de-la-religion/
La educación ética para los creyentes es: “no hagas esto o aquello que dios te va a castigar”. Eso no es educación, eso es represión por miedo.
ResponderEliminarLos verdaderos psiquiatras que entendieron que la religión y las creencias son un delirio, deducen la religión como un trastorno mental que entra en conflicto con la realidad, o como diría Freud, una “psicopatología infantil”.
·No entiendo porqué es obvio que una persona que dice ser Napoleón o un extraterrestre es considerada enferma mental y tratada por psiquiatras mientras que otra que dice ser el Mesías, la reencarnación de Buda o que dice hablar con el Espíritu Santo o con San Apapurcio se considera cuerda.
ResponderEliminarPero es que ser creyente no es lo mismo que eso que usted establece, a saber "decir ser el mesias", "creerse la reencarnación de buda" o "hablar con el espiritu santo" (como si este fuera una alucinación).
Si alguien habla con el Espiritu Santo, yo lo hago cada día, lo hago no como un esquizofrenico con su alucinación, lo cual sería un grave problema psiquiatrico, sino de modo parecido a alguien que habla ante la tumba con el ser querido que hay en ella, y yo no veo patologia alguna . Esto puede ser absurdo, puede si se quiere ser irracional, pero no una patologia psiquiatrica. Ser irracional, si quiere verlo así, no es ser loco. El hombre es irracional muy a menudo por no decir casi la totalidad de su vida. El actuar y sentir racional requiere mucha educación, y autocontrol, y aún así siempre salta la liebre de nuestra irracionalidad (que no locura).
Si cree que calificando de locos a los creyentes ya ha dado con la explicación del hecho religioso, yo solo puedo encogerme de hombros y disentir, me parece una perspectiva que explica muy poco el hecho religioso. Explica, si acaso, que en los delirios de locura hay mucho de contenido religioso.
Gracias por las respuestas y por publicar mis comentarios.
Un saludo.
Enric
ResponderEliminarEl papa catolico habla con la paloma fornicadora y recibe de ella órdenes celestiales directas, es decir está loco de atar y ahí le tenemos dirigiendo la vida de casi mil millones de personas. Millones de creyentes afirman haber hablado con la virgen, los santos, el dios elefante, etc. y que estos entes les han solucionado problemas y les han realizado milagros ¿están cuerdos? Menos mal que a tí por ahora no te contesta la paloma, eso sí cuando recibas comunicación directa de ella por favor acude a tu psiquiatra y no hagas como otros muchos de tus compañeros que empiezan a predicar.
·El papa catolico habla con la paloma fornicadora y recibe de ella órdenes celestiales directas
ResponderEliminarEso es falso a todas luces, es una caricatura que hace a su medida. ¿Paloma FORNICADORA? ¿ Ordenes celestiales DIRECTAS? . No sé ni como tomarlo. ¿¿??.
· Millones de creyentes afirman haber hablado con la virgen, los santos, el dios elefante, etc. y que estos entes les han solucionado problemas y les han realizado milagros ¿están cuerdos?
Pues posiblemente no. Pero yo me muevo en entornos muy cristanos y no conozco a nadie (digo a nadie, y no a muy pocos) que diga haberle pasado esas cosas o semejantes. Pero yo pensaría como usted de entrada, si alguien le pasa algunas de esas cosas, no sé si loco, pero un delirio pasajero y sospechoso de locura sí que diría que tiene. Piense de todos modos que muchos creyentes defienden equivocadamente su creencia tratando de espresar algo sobrenatural y fuera de todad duda, y buscan relatos que muestren tales cosas, pero sule ser mentira lo que dicen o una especie de crerse la propia mentira al expresarla al otro. Más que locura son aspectos psicologicos propios de los humanos. Obviamente hay algunos casos de locura patente.
·Menos mal que a tí por ahora no te contesta la paloma, eso sí cuando recibas comunicación directa de ella por favor acude a tu psiquiatra y no hagas como otros muchos de tus compañeros que empiezan a predicar.
Gracias por preocuparte por mi salud. Pero no creo que me conteste (al modo de una alucinación esquizofrenica): La religión no hace loca a la gente que no tiene ya una predisposición psiquica y neuronal a serlo, puede hacerlos supersticiososs, irracionales, darles espeeranzas poco racionales, ... Pero aunque lo de menos aquí soy yo, no me identifico con nada de esas cosas.
Un saludo
Bueno se ve que de doctrina católica entiendes muy poco. Resulta que un dogma de la iglesia católica es la infalibilidad del papa que:
ResponderEliminar"Según la guía doctrinal de la Iglesia, la enseñanza del papa está libre de errores solo cuando es promulgada como «solemne definición pontificia», que se supone asegurada siempre por la asistencia personal del Espíritu Santo."
https://es.wikipedia.org/wiki/Infalibilidad_papal
Así que ya ves, la paloma fornicadora (puesto que inseminó a María) asiste personalmente al papa en las cuestiones más importantes. Si eso no es una aceptación de locura de toda la curia vaticana pues yo ya no sé qué decirte.
Con respecto a las peticiones y los milagros se ve que el entorno católico en el que te mueves es muy extraño, puesto que la gran mayoría de los católicos acuden con frecuencia a la iglesia a encender velas o van de romerías para agradecer los dones y milagros recibidos por su dios, desde los más estúpidos hasta las supuestas curaciones milagrosas. Si buscas en google hay miles y miles de testimonios sólo en castellano por los supuestos milagros realizados a católicos, protestantes y demás cristianos. Así que quizás deberías plantearte tu fe, puesto que parece que tu dios te hace poco caso y se dedica a repartir sus favores a otros.