El problema de la ultraderecha nazionalcatólica
española y su absurdo y demencial mundo irreal, basado en las alucinaciones de unos ignorantes pastores de cabras de la Edad del Bronce, lleva como no podía ser de otra manera, al más
puro dislate. Porque si no juzgue ustedes.
VOX, el partido que quizás se
encuentra más a la derecha del espectro político español, lo que es mucho
puesto que casi todos están muy escorados a estribor, ha recogido la demencial
idea del incalificable líder del nazionalcatólico Foro de la Familia, Benigno
Blanco, de ¡agárrense! permitir
que los padres puedan votar por el conjunto de sus hijos.
Es decir, un matrimonio con dos hijos menores de edad podría votar 4
veces en las elecciones y una familia numerosa cristiana de esas del Opus Dei
para las que los métodos anticonceptivos son inventos del Demonio y tienen 8
hijos pequeños, uno cada vez que la mujer vuelve a ser fértil tras el parto
pues tendrían derecho a votar ¡diez veces!.
Por supuesto, imagino que como
estos papanatas cristianos consideran que desde el momento de la fecundación
tenemos un ser humano completo y con todos sus derechos inalienables, pues
también querrán votar por todos los fetos cristianos que vienen de camino. Así
entonces una santa familia cristiana como esta
podría llegar al colegio
electoral y votar dos veces por los padres, 15 veces por los churumbeles de la
foto y como la señora está ya un poco gordita imagino que ya está
"cocinando" al siguiente cristianito, pues al final tendríamos un total
de ¡18 votos! legítimos y a tomar
vientos la democracia tal y como la conocemos.
No me digan que no es surrealista la imbecilidad de este partido
político.
Aunque para mi gusto se han
quedado un poco cortos, porque eso de dejar que la madre vote por la mitad de
los hijos no parece muy cristiano. Como es bien sabido, en una
familia tradicional y católica de verdad (las de toda la vida) quien debe tomar
las decisiones es el cabeza de familia, es decir el padre, así que ya puestos,
además de por toda la prole, pues que también vote directamente por su
cristiana esposa, que la pobre es inferior al varón tanto en intelecto como en
raciocinio, como cientos de doctos padres de la iglesia han demostrado a lo
largo de los milenios. Y así se volvería a restablecer el orden natural de la
sociedad: el hombre votando tropecientas veces, mientras la santa esposa se
queda en casa limpiando, cocinando y atendiendo a la numerosa prole. Y ya de
paso si la familia tiene también mascota: perro o gato, pues también debería
poder añadir un voto más, puesto que ya sabemos que los animales son también criaturas del señor.
Jajaja, no se pueden decir más cosas con más lógica, en menos tiempo y encima haciendo sonreir. Me gustaría comentar de vez en cuando, pero es que ya lo dices tú todo y ni siquiera puedo discrepar.
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