Dentro del fanático mundo del protestantismo estadounidense
pueden encontrarse las más alocadas prácticas religiosas capaces de desafiar cualquier
tipo de lógica o razón. Pero quizás una de las más absurdas y peligrosas de
estas innumerables variantes cristianas que interpretan de forma literal a la
Biblia se da en lo más profundo del mundo rural del Sudeste de los EEUU.
En EEUU las iglesias pentescostales (con millones de seguidores en todo el país) interpretan de forma literal la
Biblia de tal manera que creen en la pervivencia actual de todos y cada uno de
los milagros descritos en el Antiguo Testamento, por lo que entonces sus adeptos creen
por ejemplo en la vigencia de la sanación
por fe o afirman que
"la práctica de hablar lenguas desconocidas en sus momentos de éxtasis espiritual se produce por voluntad del Espíritu Santo, y que las personas que viven dicha experiencia pueden expresarse en lenguas angelicales o humanas que no les son propias, y pueden o no ser entendidas por aquellos que lo escuchan"
Por supuesto que si hablan en lenguas divinas (o más bien
que producen un galimatías inconexo de sonidos cacofónicos bajo los efectos de
sus delirios religiosos) no existe ser humano capaz de entender esta absurda
jerigonza.
Y además existe una variante minoritaria de estos
literalistas bíblicos que ha arraigado en las zonas más remotas e ignorantes de
estados fundamentalistas como Alabama, Tennessee, Georgia o Kentucky capaces de
seguir los más dementes pasajes de la Biblia. Así a principios del siglo XX, un
tal George Went Hensley
notó una falta de rigor religioso en su ya de por sí estricta y piadosa
comunidad de fanáticos cristianos e interpretando literalmente un oscuro pasaje
del Evangelio de Marcos
"Y estas señales seguirán a los que creen: En mi nombre echarán fuera demonios, hablarán nuevas lenguas. Tomarán en las manos serpientes, y si bebieren cosa mortífera, no les hará daño; pondrán las manos sobre los enfermos y ellos se recuperarán"
entendió en su vehemente locura que los
verdaderos cristianos al ser los elegidos por el Espíritu Santo eran capaces de
manipular serpientes venenosas sin ningún tipo de daño. Y aunque él mismo murió
posteriormente por la mordedura de una serpiente delante de sus propios fieles
en mitad de un sermón (señal de que quizás no era tan piadoso creyente como él suponía) el mal estaba hecho y diversas pequeñas congregaciones se han ido
extendiendo por todo el Cinturón
de la Biblia estadounidense propagando esta absurda y
peligrosa práctica hasta nuestros días, liturgia absurda y suicida que se va cobrando el tributo de la
muerte de algún demente predicador de vez en cuando. Así a finales de los años
40 del siglo pasado cinco predicadores murieron en directo en diversas iglesias
del estado de Tennessee. ¡Hay! Qué difícil es mantenerse en la verdadera y
cristiana fe.
Pero quizás el caso más absurdamente recurrente de esta insana práctica fue la muerte en vivo y en directo en medio de sus respectivas actuaciones de los predicadores Wolford: el padre murió de mordedura de serpiente en 1983 y el hijo en 2012. Está claro que hay familias de piadosos creyentes que no saben cómo contentar a su amado pero a la vez irascible y rencoroso Padre Celestial y les pasa lo que les pasa. Ahora solo falta saber si la saga de los alucinados predicadores con serpientes Wolford continúa y el nieto sigue los siniestros pasos de sus antecesores y allá por el 2043 muere también manipulando serpientes venenosas.
Pero quizás el caso más absurdamente recurrente de esta insana práctica fue la muerte en vivo y en directo en medio de sus respectivas actuaciones de los predicadores Wolford: el padre murió de mordedura de serpiente en 1983 y el hijo en 2012. Está claro que hay familias de piadosos creyentes que no saben cómo contentar a su amado pero a la vez irascible y rencoroso Padre Celestial y les pasa lo que les pasa. Ahora solo falta saber si la saga de los alucinados predicadores con serpientes Wolford continúa y el nieto sigue los siniestros pasos de sus antecesores y allá por el 2043 muere también manipulando serpientes venenosas.
Ahora se entiende porque esta creencia sigue siendo muy
minoritaria en EEUU (país abonado a cualquier tipo de locura religiosa que cuanto
más irracional sea más aceptación tiene) ya que se ve que nunca hay suficientes
predicadores vivos que sean capaces de jugarse la vida cada domingo demostrando
su inquebrantable fe en defensa de las demencias escritas por el evangelista
Marcos.
En resumen, que este tipo de comportamientos
refrendados bajo el todopoderoso paraguas de la inmunidad religiosa, me
reafirman en mi idea de que la locura religiosa es una enfermedad mental más
que debería estar incluida en los manuales de psiquiatría y que estos pobres
enfermos deberían estar recluidos por su propio bien en instituciones
psiquiátricas bajo una adecuada supervisión médica. Y en cambio ahí siguen desde
sus intocables y respetados púlpitos pervirtiendo las simples mentes de los más
ignorantes e influenciables miembros de nuestra especie.
P.D.
National Geographic va a estrenar este otoño un
documental sobre estos ignorantes, fanáticos y suicidas fundamentalistas
religiosos que no olvidemos viven y mueren en EEUU y no en las lejanas montañas
de Afganistán. Misterios de la locura humana.
Una lástima que esos predicadores no se tomen literalmente el "y si bebieren cosa mortífera, no les hará daño", sería bastante más efectivo que las serpientes.
ResponderEliminarUn saludo y felicidades por el blog!
En realidad si beben veneno en sus ceremonias, te puedo confirmar que esta documentado varias muertes por beber estricnina en las ceremonias pentecostales de los Apalaches, al menos desde los años 40. Lo curioso del caso del caso, es que estos pentecostales fundamentalistas mal interpretan la perícopa de Marcos 16:18; este versículo debe interpretarse en relación a Lucas 10:19
EliminarMirad, os he dado autoridad para hollar sobre serpientes y escorpiones, y sobre todo el poder del enemigo, y nada os hará daño. El sentido de estos dos textos es claro, pero la enorme ignorancia exegética de los pentecostales lo pervierten, Cristo les he dado a los discípulos autoridad sobre todos los poderes del enemigo (Del Diablo) pueden caminar entre serpientes y escorpiones (demonios) y aplastarlos.
¿Y quién está "cualificado" para interpretar correctamente la palabra de dios? si según los propios libros sagrados el hombre es menos que una hormiga.
EliminarPor suerte es una creencia muy minoritaria, pero lo lamentable es que todavía haya gente que la siga practicando. ¡Ven en directo cómo mueren sus predicadores y aún siguen creyendo las palabras de éstos! ¡Es completamente absurdo!
ResponderEliminarEl artículo del Washington Post recoge lo que Wolford dijo sobre la muerte de su padre: "[...] murió por lo que él creía". Muy bien; me parece perfecto que esta gente dé su vida por su fe. Pero que no juegue con la vida de los demás.
Yo creo que este tipo de creencias debería practicarse más :P
ResponderEliminarLo más interesante de George Went Hensley es que era un curandero analfabeto divorciado que se casó 4 veces, y que empezó el peregrino rito de manosear serpientes cuando oyó su esposa leer ese pasaje. Cosas del protestante libre examen de la Biblia.
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