En un momento en donde autoridades sanitarias y
profesionales médicos recomiendan a todos los ciudadanos que extremen las
medidas higiénicas y se relacionen con la máxima precaución para no facilitar
el contagio con el ya famoso coronavirus originado en China, los creyentes
atendiendo a su más que deficiente forma de pensar facilitan la diseminación de
todo tipo de microbios.
Y así, con motivo de
la próxima celebración de la Semana Santa los piadosos no van a cambiar en nada
esos antihigiénicos comportamientos casi tribales (heredados de nuestro remoto
y más que ignorante pasado) como el de hacer largas filas para besar todos la
mano de la estatua de escayola de su devoción, de tal manera que tras cien o
mil piadosos parroquianos imaginen como estará el susodicho muñeco. ¡La forma
más eficiente de diseminar pandemias!
Pero todos tranquilos, porque ante la crítica el hermano
mayor de una de las hermandades sevillanas ha dado muestra de su patética
debilidad mental cuando ha afirmado que es imposible que esa más que asquerosa
tradición de besar todos a uno el mismo trozo de escayola sirva para diseminar
el coronavirus ya que y
cito textualmente
“La virgen tiene las manos inmaculadas. Está exenta de virus”
Y a ver quién es el que se arma de paciencia para decirle a
este pobre descerebrado que de virgen nada, que es un trozo de madera rebosante
de saliva.
En Sevilla besan manos, y en Irán chupan puertas sagradas. Lo he visto hoy en las noticias :-)
ResponderEliminarLos unos como los otros tarados mentales.
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