Aunque está más que demostrado que la religión en general y
el cristianismo en particular no son más que un absurdo delirio, no puede dejar
de sorprender que en supuestamente avanzado mundo del siglo XXI se sigan repitiendo
los mismos nefastos comportamientos.
Porque que a día de hoy sobrevivan millones de literalistas
bíblicos, que creen que lo escrito en esa colección de disparates de la Edad
del Bronce en la que consiste el sagrado libro judeocristiano tiene delito. Y luego
pasa que, cuando uno de estos pobres descerebrados pone en marcha ese
maravilloso órgano del raciocinio que portamos en nuestra cabeza, y analiza lo
escrito en la Biblia llega a las más sorprendentes (y en este caso
escatológicas) conclusiones.
Así, un pastor protestante fundamentalista (de los que tanto
abundan en tierras estadounidenses) se puso el otro día en medio de un sermón a
echar cuentas de lo que significaba manejar el día a día del famoso (y más que
increíble por cierto) Arca de Noé. Y pensando y pensando, nuestro
predicador llegó a la conclusión de que Noé y su familia tendrían que haber
tenido un monstruoso problema logístico si de verdad el Arca hubiera
transportado una pareja de cada bicho viviente.
Porque estos “elegidos” tendrían que haber manejado las
deposiciones de esos miles y miles de animales (pequeños, medianos y también
tan grandes como los rinocerontes o los elefantes). Y con la calculadora en la
mano nuestro pastor llegó a la conclusión de que tantos animales deberían producir la nada despreciable cifra de entre 5
y 12 toneladas diarias de ¡pura mierda!
Y entonces la piadosa familia de Noé tendría que haber
dedicado más horas de las que existen en el día para tirar por la borda toda la
caca generada por esa multitud de bestias transportdas para evitar morir
intoxicados y que el Arca no se hubiera podrido directamente o hundido por su
propio peso.
Así que imaginen a la media docena de pasajeros del Arca
acarreando y tirando por la borda las boñigas de los animales cuales Sísifos,
porque su tarea sería interminable ya que solo la pareja de elefantes generaría
unos 140 kg de excrementos diarios. ¡Menuda estampa más espiritual!
No hay nada nuevo bajo el sol, y menos en el tema de la religión. Por eso alguien dijo una vez
ResponderEliminarirónicamente que las posiciones heréticas son parecidas a las eróticas, es decir, limitadas y
repetitivas. Celso, el famoso intelectual anti-cristiano del siglo II usaba argumentos similares.Y antes de él Apeles, el discípulo del hereje Marción en su negación de la inspiración divina del Antiguo Testamento. En realidad la propia Biblia reconoce que el Diluvio Universal es una figura del bautismo; La Iglesia es el Arca del cual se salvan sus ocupantes, el agua del Diluvio es el agua del bautismo : 1 Pe 3, 18-19
Las dimensiones de un arca para llevar una pareja de cada animal sería cientos de veces más grande que un buque carguero, la logística para alimentar y limpiar desechos no lo podría hacer una familia pequeña y los animales modernos tendrían cualquier cantidad de taras o no habrían sobrevivido debido a la falta de diversidad genética. Conclusión, otra mentirita más de la Biblia, pero los fanáticos modernos, dada la evidencia científica, dirán que es una metáfora pero hace un par de siglos se daba por real ese cuento. Como quien dice, en un par de siglos en el futuro les va tocar decir que todo es una metáfora.
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