Ya sabemos que para los sotanados garantes de la moral y sus
corifeos políticos y mediáticos siempre son más importantes los supuestos
derechos de un zigoto o una mórula que el bienestar, la
salud e incluso la vida de una mujer adulta, pero el
último caso de fanática intransigencia que nos viene desde El Salvador
pienso que traspasa todos los límites de decencia y de la ética y debería
hacernos reflexionar si la jerarquía católica no es más que un conjunto de
depravados enfermos mentales con claros tintes de naturaleza psicopática.
Resulta que una joven salvadoreña enferma de lupus y con
insuficiencia renal grave, enfermedad ésta que se está agravando con la
progresión de su actual embarazo, presenta un alto riesgo de muerte.
Además se da la circunstancia que la joven se encuentra gestando un feto con anencefalia, una terrible anomalía
totalmente incompatible con la vida
extrauterina ya que el feto carece parcial o totalmente del cerebro, cráneo
y cuero cabelludo tal y como muestra la siguiente fotografía.
Pero el problema es que en El Salvador existe una ley que tipifica
como "homicidio agravado" al aborto en todas sus variantes e impone
penas de hasta 30 años de prisión a quienes lo practican, por lo que esta mujer
está obligada a continuar con su terrible y anormal embarazo, morir en el
intento o si con suerte y mucha ayuda médica consigue llevarlo a término, parir
a un monstruo que morirá nada más nacer o bien a los pocos días. Tal es el
escándalo que hasta
la ONU ha solicitado al gobierno salvadoreño que se interrumpa el embarazo.
Y por supuesto como era de esperar la iglesia católica ha
mostrado su oposición al tratamiento ya que según el arzobispo de San Salvador
“Nos preocupa que el caso de esta joven sea la puerta para legalizar el aborto en el país"
Así que ya saben, esta joven deber morir o alumbrar a un
monstruo de feria para que la iglesia católica no se preocupe y no sufra. Para
que luego hablen de los sacrificios humanos de los aztecas.
Todo este asunto se enmarca dentro del terrible drama de los
abortos ilegales que se practican, en todos aquellos países con legislaciones
restrictivas, en condiciones de extrema falta de higiene y seguridad y las estadísticas
son pavorosas. Según diversos informes
de la OMS anualmente se realizan unos 19 millones de abortos clandestinos
en condiciones inseguras, muchos de los cuales dejan secuelas y que al final acaban
produciendo la muerte a unas 68.000 mujeres.
Así que hay que preguntarse ¿cuántas mujeres más habrá que
sacrificar ante los diversos pero siempre perversos y sanguinarios diosecillos
y sus alucinados acólitos sotanados?
P.D. a 30/05/2013
La Corte Suprema de Justicia de El Salvador acaba de rechazar la posibidad de provocar un aborto terapeútico a la jóven enferma, así que al final nuevamente los fanáticos cristianos han conseguido sus sanguinarios propósitos demostrando que la vida de un monstruo es siempre más valiosa que la de una mujer.
P.D. a 30/05/2013
La Corte Suprema de Justicia de El Salvador acaba de rechazar la posibidad de provocar un aborto terapeútico a la jóven enferma, así que al final nuevamente los fanáticos cristianos han conseguido sus sanguinarios propósitos demostrando que la vida de un monstruo es siempre más valiosa que la de una mujer.
P.D. a 4/05/2013
A Beatriz se le ha practicado una cesarea con el resultado final de que está libre de peligro y el feto (como no podía ser de otra manera al carecer de cerebro) ha muerto a las pocas horas.
Es ese el lúgubre destino que le aguarda a España con Ruiz Gallardón como ministro de Justicia.
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