Si ya has tratado en tu blog el tema de cualquiera de los artículos que lees aquí, te animo a dejar en la sección de comentarios un enlace o URL que nos lleve hacia él, siempre y cuando no sea para hacer proselitismo de la superstición en cualquiera de sus variantes. Todos ganamos con el intercambio fomentando la discusión racional.

No hay nadie más ignorante e inútil que aquel, que de rodillas y con los ojos cerrados busca una respuesta.


PARA SU INFORMACIÓN: Los ateos no creemos en ninguno de los 2.700 dioses que ha inventado la humanidad, ni tampoco en el diablo, karma, aura, espíritus, alma, fantasmas, apariciones, Espíritu Santo, infierno, cielo, purgatorio, la virgen María, unicornios, duendes, hadas, brujas, vudú, horóscopos, cartomancia, quiromancia, numerología, ni ninguna otra absurdez inventada por ignorantes supersticiosos que no tenga sustento lógico, demostrable, científico ni coherente.

Red Atea

Red de blogs AteosMagufos, Blogs de escepticismo y ciencia

Buscar este blog

17 de abril de 2020

Los EEUU fueron económicamente "comunistas" durante medio siglo


El neoliberalismo ha ganado la batalla de las ideas, de tal manera que en la actualidad el mentiroso mantra de que la única manera de que la economía no colapse es que las grandes fortunas y multinacionales paguen cada vez menos impuestos, en la creencia (casi religiosa) de que ello hará aumentar la inversión y la riqueza de alguna manera (misteriosa por cierto) acabe permeando hacia las capas más desfavorecidas de la sociedad.

Y este mito tan ficticio como el del dios elefante tiene el corolario de que si los impuestos a esos mega-ricos y super-corporaciones suben, aunque sea sólo un poco, el desastre económico será de magnitudes bíblicas.

Sin embargo, resulta que hay sólidos datos empíricos que demuestran que elevados impuestos a grandes corporaciones y a adinerados no tiene influencia alguna en la generación de la riqueza. Y estos datos no vienen de complejos modelos computerizados, ni de la historia de una pequeña república africana o asiática sino que provienen del centro hegemónico del capitalismo mundial: los EEUU de Norteamérica.

Tal y como indica en este breve video el economista Thomas Piketty los impuestos en EEUU para los ricos fueron de un más que sorprendente 80% de sus ingresos durante el medio siglo comprendido entre 1930 y 1980, impuestos que a día de hoy se considerarían confiscatorios y propios de un país comunista. Y sin embargo durante esos cinco largos decenios los EEUU siguieron siendo el centro de capitalismo mundial, los ricos y las grandes empresas no dejaron de intentar (y por cierto) ganar mucho dinero y a cambio la desigualdad se mantuvo bajo mínimos. 

Solo cuando Reagan y sus secuaces empezaron a desmontar el sistema impositivo norteamericano los problemas empezaron a multiplicarse y decenas de millones de estadounidense se convirtieron en pobres de solemnidad, aún cuando muchos de ellos tienen dos y tres trabajos que no les permiten ni siquiera llegar a fin de mes.

No hay comentarios:

Publicar un comentario