La prueba de que la religión es una invención humana es que
las creencias son el resultado de la geografía y la cultura. Los que nacen en
Irán serán chiitas, los israelíes son judíos, los birmanos budistas, los
europeos cristianos y los nacidos en la India adoran a Ghanesa.
Y todas estas diferentes creencias afirman tienen dogmas incompatibles entre sí, por lo que si una persona usa mínimamente el pensamiento crítico, haciéndose preguntas honestas y buscando una respuesta racional solo puede llegar a la conclusión de que las respuestas que dan las distintas religiones son a la vez erróneas y estúpidas.
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