A pesar de lo que mentirosamente llevan afirmando los
cristianos en los dos últimos milenios, no existen pruebas fiables de cómo
vivió, que dijo y que hizo el nazareno milagrero, solo existe una numerosa
propaganda que apareció como por arte de magia casi 100 años después de la
supuesta muerte del bastardo de la paloma fornicadora.
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