Una de las más grandes incongruencias de la religión es la
ignorante tendencia que tienen los devotos para creerse el centro del Universo,
hecho que únicamente demuestra su más que declarada y más que ofensiva incapacidad
mental.
Vivimos en un mundo, en donde millones de niños mueren al
año tras largas y terribles agonías producidas por procesos cancerosos o
simplemente de hambre.
Pero hete aquí que millones de pobres débiles mentales “piensan”
(lo que evidentemente es un eufemismo) que ese mismo dios cruel y sádico que
tortura hasta extremos de infinita maldad a esa infinidad de inocentes, luego
se va a conmover porque un habitante del más que privilegiado Primer Mundo le
soborne con cuatro padrenuestros y media docena de avemarías a cambio de
curarle las hemorroides, de conseguirle un trabajo mejor o para que ese más que
zoquete vástago pueda aprobar las asignaturas que se le llevan atragantando desde
la educación primaria.
Porque si ese ser existiera y premiara a esos egoístas descerebrados
en sus más que nimias y patéticas peticiones, mientras desoye a esos millones y
millones de verdaderos desesperados del Tercer Mundo sería para vomitarle en la
cara en el famoso día del Juicio Final.
Loco es el que culpa a Dios de las injusticias que cometen los hombres.
ResponderEliminarAhora veo, gracias Señor!
Eliminarcuantas enfermedades mortales, cuanta sequía que produce hambrunas, cuanta injusticia junta... cometemos los hombres y pagan con su vida tantos inocentes. Y Tú, paciente, nos miras con benevolencia infinita esperando que cambiemos y seamos dignos de entrar en el Reino de los Cielos, para disfrutar de tu compañía por toda la eternidad. Amen.
Julián y Luis espero que lo vuestro sea ironía, porque si no pobrecillos.
Eliminar