La prueba más evidente de que no existe ninguna deidad benevolente son los hospitales infantiles

El problema del mal es la estocada definitiva que lleva desangrando a la religión desde hace milenios, porque es inconcebible que un dios omnisciente y benevolente permita todo el infinito sufrimiento que se da en la Naturaleza en general y entre la Humanidad en particular. 

 

Y la estúpida argumentación de que todo ello deriva del hecho de que dios nos dio libre albedrío a los humanos para poder elegir entre el bien y el mal, únicamente muestra la vergonzosa estulticia de los creyentes porque ¿qué narices tiene que ver el libre albedrío con que cientos de millones de niños hayan muerto y sigan muriendo aún hoy de hambre, de horrendos cánceres o infectados por patógenos inteligentemente diseñados por esa misma malvada deidad?

Por ello, tal y como muy acertadamente indica el extelepredicador Dan Baker en este breve video, sólo hay que visitar un hospital infantil para verificar sin ningún tipo de duda de que ahí fuera si existe alguna divinidad, es todo menos que benevolente.