12 de febrero de 2014

¿Pero queda algún católico de verdad en España o en el resto del mundo?



La iglesia católica presume de ser tras el Islam, la segunda confesión religiosa con mayor número de adeptos del mundo, Pero ¿es esto cierto?

Porque una cosa es decir que más de mil millones de personas en el mundo son católicos y otra muy distinta es que lo sean en realidad. Ser católico implica no solo creer en la Santísima Trinidad (sea esto lo que narices signifique), la virginidad perpetua de María (menudo castigo) incluso tras su sucia relación sexual zoofílica con un ave y el largo etcétera de absurdos mitos a cual más increíble y estúpido, sino (y esto es muy importante y la principal diferencia irreconciliable con el resto de los cristianos) creer en la infalibilidad del papa y de la santa madre iglesia. Y bien, ¿hacen caso los católicos a su supuestamente infalible líder supremo? Pues según la última encuesta realizada entre los católicos de medio mundo parece ser que muy poco o nada de nada.

Así sólo el 51% y 47% de los encuestados piensa que las mujeres no pueden ser sacerdotes o que los curas no deben casarse, respectivamente tal y como prohíbe taxativamente la iglesia. Pero es que en otros temas en donde los sotanados son muy beligerantes estos porcentajes se va haciendo cada vez menores dentro del supuesto rebaño católico, ya que sólo el 33% de los católicos piensan que no se debe abortar bajo ninguna circunstancia (es una pena que entre ellos esté nuestro actual ministro de Justicia, el talibán Ruiz Gallardón) y ya hablando de materia sexual únicamente un ridículo 19% de los interrogados considera a los anticonceptivos pecado emanado de las garras de Satanás (y menos mal porque imaginen a mil millones de católicos procreando como conejos). Y estos datos son todavía más exiguos cuando consideramos a los católicos europeos, ya que por ejemplo sólo se oponen al aborto el 17% de los italianos, el ridículo 12% de los españoles y el marginal 7% de los franceses católicos. Vamos, que una cosa es autodenominarse católico y otra muy distinta serlo de verdad. 

Si aplicáramos esta laxitud ideológica de considerarse todo lo contrario de cómo actúan en realidad al resto de la población, bien podríamos encontrarnos con situaciones absurdas como que los miembros del Kukuxklán o de las SS o la Gestapo se consideraran defensores de los derechos humanos únicamente con su palabra, aún cuando luego se dedicaran a apalear o a matar negros o judíos. 

En resumen, que una cosa es aparentar y otra muy distinta cumplir con las exigencias de la única y verdadera fe, y así que quieren que les diga, luego llegará el día del Juicio Final y ¡Oh sorpresa! a compartir hacinados (porque a la vista de los datos en el cielo van a ser cuatro gatos) las calderas de Pepe Botero con musulmanes, budistas, cienciólogos, ateos, herejes, hinduistas, satánicos, testigos de Jehová y demás gente de mal vivir. Aunque claro, quién va a querer compartir toda la eternidad con Rouco Varela y sus obispos ultramontanos, Ana Botella, Ruiz Gallardón y demás alucinados del PP?

4 comentarios:

  1. Cada vez son menos pero mas fanatizados

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  2. Pues parece que nadie se da cuenta, pero yo cada vez que escucho eso de "soy católico pero no practicante" pienso "¿querrá decir que no pone inyecciones?" Porque es como decir que eres futbolista pero que no tocas un balón jamás, se es o no se es ¿no? Lo contrario es un mamoneo estúpido que se traen algunos para hacer lo que les da la gana y tener contento a ese dios que se deben imaginar tonto de remate porque nadie con dos de dos de frente (y menos alguien presuntamente omnisciente) se tragaría algo tan absurdo.

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  3. Como admiro tu pagina y me he reido a montones con ella, quiero compartir un link ...
    http://www.youtube.com/watch?v=9JI2ReGEUp8

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  4. me guardo la imagen, me he reido mucho.

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