7 de mayo de 2012

Persecución y encarcelamiento de un ateo en Indonesia


Un ciudadano indonesio comentó en su Facebook que “dios no existe” y ahora se enfrenta a un juicio en el que puede ser condenado a una pena de 11 años de cárcel por blasfemia. Cinco años serían por insultar a una religión y otros seis por usar internet para difundir blasfemias. Además nuestro ciudadano ha sido rechazado por su comunidad y apaleado por una turba de encolerizados creyentes. Las autoridades están dificultando sus comunicaciones con sus abogados que también están siendo perseguidos e intimidados. La situación es tan dramática que este individuo ha tenido que pedir disculpas públicas y hacer profesión de fe musulmana ya que algunas asociaciones islámicas han pedido que se le aplique la pena de muerte vigente en el país.
Ello es posible porque resulta que aunque Indonesia es una democracia formal en la que existe libertad de culto, ésta únicamente es aplicable si el ciudadano se define como creyente en alguna de las siguientes seis religiones: islam, catolicismo, protestantismo, budismo, confucianismo e hinduismo. Cualquier persona que crea en otra religión diferente o como nuestro protagonista que no cree en ninguna de ellas puede ser perseguido por las leyes antiblasfemia y de defensa de la religión indonesias y encarcelado. Así, no sólo existe persecución contra los ateos sino también contra algunas religiones minoritarias no reconocidas ni amparadas por las leyes del país, de tal forma que diversos colectivos de derechos humanos comunican que están aumentando los actos de intolerancia por motivos religiosos.
En resumen, un nuevo caso de persecución en nombre de absurdos y alienantes seres mitológicos.


P.D.
En la actualidad decenas de países, incluidas muchas democracias occidentales, mantienen leyes contra la blasfemia que persiguen el ateísmo con penas que oscilan desde algunos meses de cárcel hasta la pena capital. Por lo que los ateos en gran parte del mundo seguimos siendo una de las principales minorías objeto de persecución ideológica.

1 comentario:

  1. La creencia en una religión puede ser considerada blasfemia para otra. Por ejemplo, el afirmar la divinidad o no divinidad de Jesucristo para judíos o cristianos. La única forma de no blasfemar es ignorar todas las religiones. Siempre que no se diga que se hace eso, claro.

    ResponderEliminar