Leo en Público que en Madrid los funerales
civiles están aumentando en los últimos años de tal forma que ya son el 10%
del total. Puede parecer poco pero teniendo en cuenta que mayoritariamente
mueren las personas de más edad, es decir aquellas con una visión más
conservadora de la vida el dato es más que evidente. Para los miembros de la
secta católica que se regocijarán con ese abrumador 90% de enterramientos
católicos recordarles que como en todas sus sesgadas estadísticas una persona
que sólo ha pasado por la iglesia en unas pocas decenas de ocasiones en toda su
vida incluyendo bautizo, comunión y saraos varios en forma de matrimonios de
familiares y amigos además de su propio entierro y que el resto de su vida ha permanecido
al margen de cualquier tipo de religiosidad tiene poco de católico. Y además la
mayoría ni siquiera ha sido capaz en toda su vida adulta de marcar la casilla
de la iglesia católica en su declaración del IRPF aunque le hubiera salido gratis (recordemos que en España únicamente un
tercio de los españoles la marcan). En resumen, que todos los datos
estadísticos muestran una España que sólo aparentemente mantiene las formas del
catolicismo como un hábito aprendido de memoria que no conlleva reflexión o
implicación alguna hacia los parásitos eclesiásticos.
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