A pesar de que los creyentes llevan vilipendiando por amorales a los ateos, la cruda y certera realidad es la contraria ya que como bien indica en el siguiente video Alan Dershowitz, experto en la Constitución y el derecho penal estadounidenses.
Y eso que los ateos no buscamos ni el soborno celestial ni tememos el castigo infernal. Ya que ¿cómo puede ser más moral el que hace una buena obra esperando una generosa recompensa o tiene un miedo terrible miedo a un castigo brutalmente infinito que aquel otro que para salvar la vida de una persona pone en riesgo su propia vida, esa que tras la cual él sabe con total rotundidad que le espera únicamente servir de pasto para gusanos?
Sobre la apuesta de Pascal, está la clase de dios en la que, se supone, crees. Por un lado, te lo ponen como un ser omnipotente, omnisapiente y varios omnis más, pero al que por lo visto es muy fácil de engañar. O crees o no crees, pero el "por si acaso" creo que reduce a tu dios mucho más de lo que lo hacemos quienes no creemos en él...
ResponderEliminarEs que hay que se muy imbécil para "argumentar" como lo hizo Pascal, eso demuestra que por muy inteligente que uno sea si se infecta con el virus de la fe se convierte uno en un zombi.
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