2 de enero de 2020

Un dios bromista y sus dinosaurios

El divertido y siempre más que blasfemo Bill Hicks desvelando la verdadera realidad de la religión: convertir en semideficientes mentales a sus adeptos. 

2 comentarios:

  1. Anónimo6:45 p. m.

    La máxima epítome de los ateos: cuando se acaben los argumentos hay que recurrir a la burla.

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    1. La burla es lo más adecuado frente a ese "alto argumento" de que una paloma fornicó con una virgen para engendrar a un nazareno milagrero que se dedicó a arruinar a honrados panaderos, bodegueros o pescaderos del Imperio Romano.

      Porque si no quieres que se rían de tus creencias no tengas creencias tan divertidas.

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