Debido a las presiones de los jóvenes marroquíes del Movimiento 20 de Febrero pidiendo libertad y democracia el rey absolutista de Marruecos acaba de presentar un proyecto de nueva constitución en donde parece que se recortan un poco los abusivos poderes de este reyezuelo medieval. Pero no todo van a ser buenas noticias. Dicha nueva carta magna del Marruecos del siglo XXI mantiene la designación de Mohamed VI como Comendador de los Creyentes marroquíes. Vamos que aparte de rey es papa, como la reina de Inglaterra. Además Marruecos continuará siendo un estado musulmán en donde el derecho de familia seguirá estando bajo la tutela del islam. En resumen unas medidas absolutamente cosméticas que siguen dejando a nuestros vecinos del sur amordazados por la tradicional entente monarquía-religión que tan nefastos resultados ha dado a lo largo de los siglos independientemente del patético diosecillo al que se adore. Espero que los marroquíes no aguanten semejante tomadura de pelo y sigan luchando por un verdadero estado democrático que buena falta les hace.
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