Richard Dawkins visita una escuela islámica en donde todas
las alumnas (por supuesto debidamente tapadas como manda el canon musulmán) han
"decidido" no creerse ese más que ateo darwinismo, porque estas
adolescentes saben más que los miles de científicos que se dejaron la vida
desentrañando sus mecanismos. Una escuela en la que la supuesta profesora de
ciencias no sabe explicar la evolución. Y no se crean que Dawkins tuvo que
viajar miles de kilómetros a un rincón perdido de Afganistán para hacer la
visita, el metro de Londres le llevó hasta su destino en unos pocos minutos.
Si ya has tratado en tu blog el tema de cualquiera de los artículos que lees aquí, te animo a dejar en la sección de comentarios un enlace o URL que nos lleve hacia él, siempre y cuando no sea para hacer proselitismo de la superstición en cualquiera de sus variantes. Todos ganamos con el intercambio fomentando la discusión racional.
No hay nadie más ignorante e inútil que aquel, que de rodillas y con los ojos cerrados busca una respuesta.
PARA SU INFORMACIÓN: Los ateos no creemos en ninguno de los 2.700 dioses que ha inventado la humanidad, ni tampoco en el diablo, karma, aura, espíritus, alma, fantasmas, apariciones, Espíritu Santo, infierno, cielo, purgatorio, la virgen María, unicornios, duendes, hadas, brujas, vudú, horóscopos, cartomancia, quiromancia, numerología, ni ninguna otra absurdez inventada por ignorantes supersticiosos que no tenga sustento lógico, demostrable, científico ni coherente.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario