El Parlamento Vasco denuncia al fascismo franquista

Ya era hora de que, en un país en donde el fascismo franquista sigue carcomiendo las instituciones del estado y en donde altos cargos del partido gobernante hacen continua y obscena apología de la dictadura criminal, algunos poderes públicos como el Parlamento Vasco empiecen a denunciar los crímenes cometidos en esta terrible época de represión y oscurantismo.

Así próximamente el Parlamento Vasco aprobará una proposición no de ley para mostrar "su apoyo y adhesión" a la querella presentada en Argentina contra los responsables de la dictadura franquista por los delitos de genocidio y crímenes de lesa humanidad. Por supuesto el Partido Popular fiel a su filofascismo ideológico ha comunicado que votará en contra, ya que eso sería denunciar a la práctica totalidad de las cúpulas dirigentes del partido desde su fundación y hasta el día de hoy. 

El texto de la proposición indicará claramente la denuncia del Parlamento contra

"la sublevación militar fascista dirigida por el general Francisco Franco Bahamonde en julio de 1936" y "el régimen dictatorial posterior que durante cuarenta años reprimió a sangre y fuego todo vestigio de disidencia y lucha por la libertad".

Esta proposición incluirá la denuncia del

"papel jugado por buena parte de las oligarquías agraria, industrial y financiera y la jerarquía de la Iglesia Católica, con su apoyo al golpismo primero, y al régimen fascista instaurado después".

Y quizás lo más importante de todo es que el documento recoge el derecho a

"que se implementen medidas de cambios sociopolíticos, jurídicos e institucionales como garantía de no repetición".

Porque mientras no existan mecanismos claros dentro de nuestra sociedad para perseguir este tipo de crímenes y evitar su enaltecimiento, siempre tendremos sobre nuestras cabezas la espada de Damocles de aquellos que, sintiéndose seguros por la impunidad pasada puedan pensar en repetir estos criminales actos en cuanto la pseudodemocracia actual no cumpla con sus expectativas de control, adoctrinamiento y explotación de las masas.